R.S. vecino de la plaza de la Biosfera, desde antes de construir el edificio del Consell Insular, me recomendó visitar esta zona, para comprobar in situ como está y quedamos para darnos un garbeo por «su» urbanización y vatuadell cent llamps...
Dejaremos de comentar el tema de los jardines, ya que siguen en la misma situación que denunciaba en mi artículo de Enero pasado...Una palmera se parece a un monolito, que se tendría que sustituir ya que da pena el aspecto visual.
Comprobamos que la mayoría de las rejas que hay en el suelo, están totalmente obstruidas por las malas hierbas, por falta de limpieza. Con unos hierros salientes, que pueden provocar caídas a los peatones. ¡Mal! La mayoría de los pasos de peatones nos topamos en las salidas con farolas o árboles, sin tener en cuenta los que se desplazan en silla de ruedas. ¡Mal! Los bancos de piedra, en la mayoría no es posible sentarse, por la porquería que hay encima, o sea, donde nuestras posaderas descansan. ¡Mal! Las aceras la mayoría con las baldosas levantadas, provocadas por las raíces de los árboles. ¡Mal! Donde tendría que haber césped, la hierba está mas seca que un bruc, por falta de mantenimiento y riego, desde hace mucho tiempo. ¡Mal! Una caseta de electricidad, hace tiempo se rompió las piedras de marés...solución, los trozos situados en lo alto de la caseta vecina. ¡Mal!
Podemos comprobar que hace poco, han derrumbado una vieja y abandonada, casa que parece ser que la solían ocupar, okupas, magnífica solución para evitarlos definitivamente. ¡Bien!
He recibido unas fotos de R.S., nocturnas, ya que en la plaza hay instalados puntos de luz, que llevan mucho tiempo sin alumbrar, siendo peligroso el transitar los peatones. ¡Mal, muy mal!
Nota de R.S.: «Sr. Barber, la tarde en la que paseamos por Malbuger fue maravillosa por la compañía, porque el resto: las plantas, los árboles, el suelo, ... lástima que no pudimos mirarnos mucho porque debíamos ir pendientes de donde poner los pies, dada la gran cantidad de desperfecto y suciedad que hay por todas las calles de la urbanización, además también había que tener cuidado con las ramas de los árboles que, por su falta de poda regular y generalizada, están a la altura de cualquier viandante. A los desperfectos de la 'plaza de la Biosfera' en sí, se pueden añadir muchas más cosas que se resumen en una sola: ¡está totalmente A-BAN-DO-NA-DA!, ¡siempre lo ha estado! Sí, ¡mal!, ¡muy mal! El escrito puede alargarse varias páginas más.
Es una pena que los responsables del cuidado de la urbanización no paseen por nuestras calles.»
José Barber Allés
Mochilero
josebarberalles@gmail.com
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