El año arriscado de las cuatro elecciones

También vamos a aprobar o suspender la gestión del Consell. En el primer caso, Susana Mora obtendrá una segunda oportunidad, tras unos pactos que ni el IBES de Gonzalo Adán puede adivinar. Y en el segundo, llegará la ocasión para que la exalcaldesa Misericordia Sugrañes lidere el cambio de rumbo y de gestión en la institución insular mediante acuerdo con otros partidos. Todo está por escribir y pactar.

En el Govern de la Comunidad Autónoma, Francina Armengol encadenará una tercera legislatura si los acuerdos poselectorales -tanto o más complicados que en el Consell de Menorca- le garantizan los 31 diputados que necesita para la investidura en el Parlament. En caso contrario, la socialista Armengol pasará a la oposición y será Marga Prohens, la candidata del Partido Popular quien formará gobierno, para lo que también deberá pactar con otras formaciones.

Y LAS GENERALES

En diciembre, después de la primera gran cita electoral del 28 de mayo, cuando ya se hayan constituido los nuevos ayuntamientos, los consells y los gobiernos autonómicos, se celebrarán los comicios generales en los que Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo se juegan todo su capital político y su futuro personal.

El socialista, desgastado por la crisis económica y las discrepancias entre quienes deben ser aliados pero son adversarios: PSOE y Unidas Podemos. Y el popular, aunque sigue primero en todos los sondeos, excepto el del CIS, constata como se reduce la distancia con el PSOE por sus bandazos en materia económica que erosionan su imagen de buen gestor y líder solvente.

Tanto en La Moncloa como en Génova saben que los resultados municipales y autonómicos de mayo tendrán influencia directa en las elecciones generales al provocar una percepción de fin de ciclo, si el PP se impone, o de continuidad, si al final el PSOE resiste.

Como escribe Javier Escartín, «en la España fragmentada y multipartidista, la disyuntiva ya no es PSOE o PP. O Sánchez o Feijóo. La decisión está entre suma de izquierdas o gobierno de coalición PP-Vox. Las muletas de ambos llegan en su mejor momento».
Podemos retrocede en las sondeos y tiene la amenaza de Yolanda Díaz, y Vox ha sufrido un 2022 aciago. Consiguió tocar poder por primera vez al entrar en el gobierno de Castilla y León, pero la decepción en las andaluzas, la salida traumática de Macarena Olona y la desbandada de concejales que sufre, desdibujan al partido: 200 concejales de los 530 obtenidos en las municipales de 2019 están fuera de Vox.

DUELO MORA-SUGRAÑES

¿Y en Menorca? El gran duelo Mora-Sugrañes se resolverá en los municipios. El poder local es decisivo, y el factor humano de los candidatos a las alcaldías, o sea, su nombre y apellidos y trayectoria personal, es relevante.

La izquierda, sobre todo las agrupaciones como Som Es Castell, la Entesa de Ferreries, Volem Sant Lluís y la Entesa des Mercadal y Fornells -excepto Ara Maó con Jordi Tutzó- va más rezagada en la designación de los alcaldables. Crecen las incógnitas sobre Ciudadanos, formación que en las encuestas no obtiene representación en Balears; Vox y El PI. Porque si una formación quiere concurrir en Menorca al Consell, al Parlament y los ocho ayuntamientos ha de contar con más de cien candidatos para las listas.

El capital humano es la clave. Y cerrar las listas no es fácil. El PI de Antoni Bosch -con Florencio Conde que sale y concurrirá por IPEC (Independents des Castell- está teniendo muchos problemas para fichar candidatos.

Lo mismo ocurre en Ciudadanos, cuyo número 1 natural en Ciutadella, Eudimio Carrasco, no quiere presentarse, y tampoco ha prosperado la ‘operación José María Taltavull’. El conseller Eugenio Ayuso levanta la vista y se encuentra solo en Maó.

En Vox no comprenden que el nuevo coordinador de Menorca, Xisco Cardona, resida en Mallorca. Han ofrecido encabezar la lista del Consell a José Ramón de Olives, pero no ha contestado.
Y también están los grandes nervios de quienes aspiran a repetir; algunos de ellos han hecho de la política su sustento, más que su profesión, sin percatarse de que acabó su ciclo; y aquellos que pretenden mover sillas únicamente para colocarse ellos.

FRASE DE LA SEMANA

«Queridos Reyes Magos… Este año os queremos pedir que se acaben los actos propagandísticos camuflados como ruedas de prensa en las que nos cortan las preguntas que no (les) interesan, como ocurrió ayer mismo en una comparecencia de @F_Armengol». Tuit del Sindicat de Periodistes de les Illes Balears.