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El retraso en la apertura de las cuevas de Cala Blanca no se debe a que el expediente esté incompleto, es por dejación, falta de impulso de la administración, falta de trabajo y voluntad política.

Tal como ya advertimos en una carta publicada en el diari MENORCA, la presidenta del Consell insular de Menorca, Maite Salord, ha necesitado un año para darse cuenta que el expediente del proyecto está incompleto, acusando al PP de empezar la casa por el tejado y dejar un caos que, por lo visto, ha enmendado dando «los pasos con rigor que estarán bien hechos». Eso a menos de un mes de unas elecciones y con parte de su equipo a la fuga. Credibilidad poca.

Por ello, queremos poner en conocimiento cuáles fueron los pasos que se dieron durante el pasado mandato para hacer realidad un proyecto en el que creemos y que es bueno para Menorca.

En fecha 17 de marzo de 2015, el equipo de gobierno del Consell insular de Menorca solicitó al Instituto Geológico y Minero de España que emitiera informes sobre 11 actividades distintas que engloban todos los informes y estudios de carácter geológico a los que hace referencia la presidenta Maite Salord.

En 2011 el plan para el desarrollo del proyecto de cuevas de Cala Blanca solo contemplaba 175.000 euros, y fue durante el pasado mandato, cuando el equipo de gobierno del Consell insular de Menorca destinó casi 1 millón de euros a financiar el proyecto, que ni tan siquiera había sido iniciado, que estaba previsto desde 2008 dentro del Plan de Dinamización del Producto Turístico.

En 2012, el Consell insular de Menorca consigue una prórroga del convenio del Plan de Dinamización del Producto Turístico e inicia los trámites del expediente. De hecho, y a diferencia de las afirmaciones de la presidenta Maite Salord, el Consell insular de Menorca había perdido la partida presupuestaria del Gobierno central por la falta de ejecución del proyecto.

A partir de ese momento, se inició todo el trabajo que debería haber hecho el anterior equipo de gobierno de PSOE y PSM. Informes geotécnicos, geológicos, de minas, jurídicos, técnicos, patrimonio, ambientales...
Paralelamente se inició la modificación del Plan General de Ordenación Urbana de Ciutadella para incluir las cuevas como elemento susceptible de ser autorizadas. También se iniciaron las reuniones con todos los propietarios del suelo que alberga las cuevas para llegar a un acuerdo y poder desarrollar el proyecto.

Se trataba además de un proyecto de gran complejidad y sin precedentes. Por primera vez en España, se estudió cómo se podían abrir unas cuevas con unas circunstancias muy concretas, el equipo de gobierno del Consell insular de Menorca trabajó con juristas,registro de la propiedad, notarios…para conseguir una fórmula legal satisfactoria para todos.

En 2015, el proyecto de cuevas de Cala Blanca estaba finalizado y pendiente de revisión. El informe geológico había sido solicitado, por lo que en condiciones normales, el proyecto ya estaría finalizado. Además, el proyecto de segregación estaba listo y solo quedaba pendiente que el Ayuntamiento de Ciutadella lo informara, un paso necesario para poder realizar la compraventa con los propietarios.

A fecha de hoy el Ayuntamiento sigue sin aprobar la modificación puntual que permita la actividad turística en las cuevas y, por tanto, conseguir la concesión de la licencia de segregación de acuerdo con el proyecto de segregación presentado en diciembre de 2014 y, que no ha podido resolver, dada la inactividad en el área de urbanismo del Ayuntamiento de Ciutadella, que solamente debía aprobar definitivamente la modificación del plan general que ya contaba con todos los informes favorables.