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En su desplazamiento a Menorca el nuevo líder del Partido Popular, Pablo Casado, afirmó que «Armengol ya ha frenado dos REB, uno aprobado en Consejo de Ministros en 2015 y enviado al Congreso para su aprobación; y el negociado hasta junio con una dotación de 380 millones de euros». El cambio de inquilino en La Moncloa, tras prosperar la moción de censura que puso fin al mandato de Mariano Rajoy y aupó a Pedro Sánchez al Gobierno, ha pillado al Govern Armengol con el pie cambiado. Ya no puede invocar el ‘Madrid me mata’ porque ahora el Ejecutivo socialista es un gobierno amigo, lo que acentúa el desmarque de Més respecto al PSIB-PSOE.

Consciente de que no resolverá el nuevo modelo de financiación autonómica el Govern del Pacte centra sus esfuerzos en la aprobación del nuevo Régimen Especial, pero la aprobación del REB no está en manos del Gobierno, al depender del Congreso. El proceso exige cerrar el acuerdo entre los dos ejecutivos, aprobación en el Consejo de Ministros, tramitación en el Congreso y el Senado y ratificación en el Congreso. ¿Conseguirá el Govern superar estos escollos y aprobar el REB antes del próximo 1 de enero?