El mandato 2015-2019 entra en su recta final y en mayo del próximo año se celebrarán elecciones municipales y autonómicas en las que se pasará balance a lo realizado. Los menorquines tendrán la oportunidad, con su voto, de aprobar o suspender la gestión realizada por quienes han estado al frente de las instituciones desde junio de 2015.
El gobierno tripartito del Consell, formado por PSOE, Més y Podemos, arrancó su mandato con doce medidas para los primeros cien días de gobierno. La primera de ellas, dedicada a la vivienda, que sigue siendo hoy uno de los principales problemas de los menorquines, agravado por la demanda y el aumento del precio de los alquileres. Otras cuestiones quedan por resolver, como la revisión del Plan Territorial Insular, con un calendario de difícil cumplimiento; las obras de la carretera -hoy se presenta al pleno la propuesta de revisión de la rotonda proyectada en Rafal Rubí-; la definición del nuevo Plan Director de Equipamientos Comerciales; los desacuerdos con el Govern del Pacte sobre los anticipos a devolver, que suman ocho millones de euros; y el plan de usos y el consorcio para el Lazareto. Muchos temas aún sobre la mesa.
