El crecimiento, en un 17,5 por ciento, del importe de la facturación del IB-Salut por la atención sanitaria que presta a los turistas pone de manifiesto la confianza de los visitantes en el sistema sanitario español. En el caso de Menorca, el hospital Mateu Orfila ha registrado un incremento del 280 por ciento respecto al año y ha alcanzado una facturación de 714.843 euros.
Aumenta el uso de la tarjeta sanitaria europea para acceder a los centros sanitarios de la red pública, aún cuando no se enmarca en el sector del llamado ‘turismo sanitario’. Al final del tercer trimestre la facturación del IB-Salut por la atención prestada a extranjeros en Balears asciende a 20,6 millones de euros, cifra que al final del año alcanzará unos 36 millones. Son cantidades importantes, lo que se ha conseguido por la mejora en la gestión de los cobros. También hay que valorar el servicio de los centros sanitarios privados, también en aumento. La sanidad pública española goza de un prestigio internacional labrado en gran medida por sus profesionales, que cubren carencias que el sistema tarda en corregir. Esta eficaz atención sanitaria, pública y privada, constituye uno de los atractivos turísticos de Balears.
