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El Consell difundió ayer los tres informes sobre la viabilidad del derribo del puente ya construido en Rafal Rubí y su sustitución por una rotonda a nivel.

Las conclusiones son contundentes al rechazar de forma tajante la demolición de la estructura y descartar, por inadecuada, la alternativa de la rotonda a nivel de carretera. Los técnicos coinciden al argumentar motivos económicos, de tráfico viario, de seguridad, ocupación de espacios y aportan soluciones para el reiteradamente invocado impacto visual y paisajístico de la carretera respecto a las navetas de Rafal Rubí.

Estos informes, junto con las severas advertencias de Secretaría e Intervención, se conocen tras la decisión de la dirección de Podemos-Menorca que ya no apoya el derribo del puente de L’Argentina. Sorprende que, a estas alturas, el conseller de Movilidad insista en la demolición del puente de Rafal Rubí.

Los tres partidos que integran el gobierno del Consell tienen que adoptar esta tarde la decisión más relevante de su mandato. Esperemos que impere el sentido común y la sensatez.

Más allá de promesas e intenciones, las decisiones políticas han de estar plenamente motivadas, avaladas y justificadas.