Al menos 17 barcas que se alquilan sin título para su gobierno y navegación ya se han hundido este verano en Menorca. Afortunadamente no se han registrado desgracias personales, pero tanto los socorristas como los coordinadores de los servicios de salvamento en las playas de la Isla advierten sobre los riesgos y peligros que corren quienes alquilan estas barcas, que en su mayoría son turistas y visitantes.
Las autoridades han registrado, con carácter oficial, estos 17 casos en los que la embarcación ha zozobrado y ha acabado hundiéndose, pero la cifra real debe ser, posiblemente, superior. Al carecer de titulación y de conocimientos sobre fondos, escollos y profundidades, quienes asumen la responsabilidad de manejar estas embarcaciones no respetan, en numerosas ocasiones, las zonas balizadas para los bañistas, y también infringen la normativa sobre donde pueden fondear y el respeto a las áreas con posidonia.
Ante estos sucesos es preciso incrementar las exigencias para que quienes alquilan una barca cuenten con preparación, formación y conocimientos. De esta forma se evitarán accidentes y también aumentará la seguridad en el litoral de Menorca.
