Editorial12/10/19 0:00
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El conseller de Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha confirmado el cambio radical en los planes del Govern para ayudar a los hoteleros afectados por la quiebra de Thomas Cook. Las críticas y la crisis abierta en el Pacte por la oposición de Més a que se destinase la recaudación de la ecotasa a inyectar liquidez a las empresas ha obligado a variar los planes iniciales. Ahora opta por abrir una línea de ayudas directas que suman tres millones de euros, una cantidad similar a la que se había previsto en concepto de ecotasa.

Ante la caída del gran mayorista británico, el Govern trató de calmar el nerviosismo del sector anunciando una más que cuestionable ‘devolución’ de la ecotasa pagada por los turistas.

De inmediato surgieron protestas y desmarques de los socios del PSOE en sede parlamentaria, con la severa advertencia de que este objetivo nada tiene que ver con los fines a los que se deben dedicar los recursos obtenidos con este impuesto, además de la dudas jurídicas que suscitaba. Al final, el Govern ha reconocido su error y su precipitación, y se ha visto obligado a rectificar. Negueruela ha buscado alternativas para que los hoteleros puedan afrontar la caída de Thomas Cook.