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Las enormes expectativas que había suscitado la asistencia, por primera vez, del Gobierno central a la ‘comisión antiapagón’, se transformaron en una gran frustración e incomodidad.

El subdirector de Energía Eléctrica, adscrito a la Secretaría de Estado de Energía, vino a Menorca con órdenes claras, emanadas del Ministerio de Teresa Ribera: no iba a hacer declaraciones, y los generadores que desde el ‘gran apagón’ de octubre de 2018 reclaman los menorquines como medida de refuerzo durante la actual situación de precariedad energética deben ser autorizados por la Unión Europea. El Ministerio ha tenido doce meses para realizar las consultas que anunció ayer el subdirector de Energía.

Seguimos sin fecha para instalar los generadores. 38.000 usuarios sin electricidad durante 56 horas no son suficientes para que el Gobierno actúe con celeridad. Menorca es ignorada.

Al mismo tiempo, Red Eléctrica sigue eludiendo cualquier responsabilidad y hace oídos sordos a las peticiones de ayuntamientos, Cercle d’Economia y PP-Menorca para indemnizar a las familias y empresas perjudicadas. Todo se fía al nuevo cable submarino, sin fecha exacta para su entrada en servicio.