Con una incidencia acumulada a 14 días de 711 casos por cada 100.000 habitantes, Menorca lidera la sexta ola de la pandemia en Balears. La variante ómicron está avanzando de manera mucho más rápida de los que se había previsto, aunque con una afección más leve que en las oleadas anteriores. En este escenario, el Govern reclamó ayer prudencia a la población y destacó que la mayoría de ingresos en la UCI corresponden a personas que no se han vacunado.
Es el momento de aplicar todas las medidas necesarias para minimizar las consecuencias de esta nueva ola del coronavirus; una tara que implica y compromete a todos los ciudadanos y las instituciones. Municipios, entidades y asociaciones están restringiendo al máximo los eventos que congregan a mucho público y donde no se pueden respetar las distancias de seguridad. Los buenos datos de semanas atrás se están esfumando día a día, circunstancia que obliga a reaccionar de nuevo para evitar el temido colapso sanitario y sus trágicas consecuencias. Las vacunas se han demostrado como el método más eficaz de protección contra la Covid, un hecho irrefutable desde la perspectiva científica y corroborado por los datos estadísticos. No caben dudas sobre la necesidad de extender la inmunización a toda la población.
