El PSIB-PSOE intenta esquivar la tormenta política por el caso Santos Cerdán

El PSIB-PSOE intenta pasar de puntillas y esquivar la tormenta política por el escándalo de Santos Cerdán, exnúmero tres del partido socialista, hoy en la prisión de Soto del Real por supuesta corrupción. Marc Pons, con larga trayectoria en las instituciones, hoy diputado socialista en la oposición en el Parlament, seguirá en la ejecutiva federal del PSOE como secretario de Transición Justa. La delegación balear, que participó ayer en el comité, con los menorquines Marc Pons y Pepe Mercadal, apoya a un Pedro Sánchez en sus horas más bajas por las crisis de Koldo, Ábalos y Santos Cerdán, cuyo final se desconoce. En este contexto, Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, pide a Sánchez que, tras estos casos de corrupción, que investigan la Guardia Civil y los jueces, se someta a una cuestión de confianza o convoque elecciones, tras estos escándalos de corrupción. «O se recupera la confianza parlamentaria que hemos perdido —y no a cambio de más chantajes [de los independentistas]—, o elecciones», sostuvo. El comité federal, que debía calmar las aguas tras el terremoto afecta al PSOE, se abrió con la informaciones sobre Francisco Salazar, estrecho colaborador de Sánchez, relativas a que ha acosado sexualmente a varias mujeres por lo que dimitió. Más incertidumbre en un PSOE tensionado y cuestionado.