TW

Al señor Rajoy y al gobierno que presidía les ha durado la mayoría más absoluta de la democracia una legislatura (ellos pensaban que les iba a durar toda la vida). Y por ser aún más preciso ni siquiera les ha servido para poder gobernar un segundo mandato porque en cuatro años de gobernar han arrasado la convivencia con las demás fuerzas políticas de tal manera que ahora nadie quiere pactar con ellos. El desastre de cómo emplearon la mayoría absoluta se refleja en los continuos avisos elección tras elección, las europeas, las andaluzas, las municipales y las catalanas. Y ahora han perdido 3,5 millones de votos y 1/3 de los diputados. Una verdadera sangría de falta de empatía que ni siquiera les ha servido para poner freno a esa mala manera de entender la política parlamentaria siguiendo hasta el último momento con la equivocada vocación de gobernar por decreto ley en vez de llevar el ejercicio de la política al Parlamento.

No se puede quejar ni la izquierda ni la derecha pues por culpa de la derecha y de una izquierda confundida, torpe y como no, enlodada hasta el cuello con la corrupción, han aflorado una súper abundancia de partidos de nuevo cuño que encima tienen en sus manos el poder de decidir quién va a gobernar España los cuatro próximos años. Y eso probablemente, no hay nuevas elecciones que lo corrija.

Noticias relacionadas

El tema no se me antoja baladí porque ahí está la secesión catalana, un paro insostenible, la caja de las pensiones que la ha dejado el gobierno Rajoy al 50 por ciento de como la encontró, la corrupción al contrario de minimizarse, sigue dando muestras de su vigor, pues es rara la semana en que no aflore un nuevo escándalo. Un empleo que ha crecido a duras penas, tímidamente, como ya vaticiné que iba a crecer cuando los salarios estuvieran por los suelos, los derechos difuminados y los despidos sujetos prácticamente a la voluntad del empleador. Si todo eso no fuera ya suficiente, queda la presión fiscal por las nubes.

¿Por qué han aflorado, y en algunos casos con fuerza, partidos como Podemos o Ciudadanos? La respuesta es sencilla, porque el votante está harto de unos y de otros, de la izquierda y de la derecha.

El próximo gobierno, si sale, de los resultados electorales del 20-D, será un gobierno presumiblemente complejo cuando no acomplejado, tanto que es lo más seguro que no dure una legislatura. Cuando estas cosas pasan, difícilmente puede la ciudadanía esperar resultados favorables. Más fácil será que les sigan estrujando en sus paupérrimos salarios y que veamos decisiones parlamentarias al rebufo de contentar al socio político que ha permitido a trancas y a barrancas formar gobierno. Todo antes de venir a socorrer necesidades sociales o enderezar una economía que Rajoy y su gobierno creen que ha corregido ellos cuando lo cierto es que la mínima corrección se debe a los sacrificios de la ciudadanía, que son quienes han pagado con su esfuerzo lo que otros desbarataron.