Advierte Ametller. El alcalde de Es Mercadal, y también presidente del PSOE-Menorca, que hace frente común con Alaior, Es Migjorn y Es Castell (PP de Lluís Camps y PI de Florencio Conde), levanta el dedo de la advertencia a las alcaldesas de Maó y Ciutadella sobre el impacto de la regulación del alquiler vacacional. Foto: GEMMA ANDREU

TW
0

Además de celebrar la fiesta de Sant Antoni, patrón de la Isla y festividad cívica de todos los menorquines, el martes 17 concluye el nuevo plazo fijado por el Consell para intentar el acuerdo en torno al alquiler turístico vacacional. Nos referimos a la zonificación, o sea, dónde, cómo y con qué tipologías se autorizará esta actividad.

Fue descartada por el Consell la opción de fijar un marco general y que después cada ayuntamiento concretara una regulación municipal mediante la aplicacion de las facultades que les confiere la Ley Turística de Balears y la autonomía municipal. Por cierto, ¿qué alcalde la invoca ahora?

Advierte Ametller. El alcalde de Es Mercadal, y también presidente del PSOE-Menorca, que hace frente común con Alaior, Es Migjorn y Es Castell (PP de Lluís Camps y PI de Florencio Conde), levanta el dedo de la advertencia a las alcaldesas de Maó y Ciutadella sobre el impacto de la regulación del alquiler vacacional. Foto: GEMMA ANDREU

En la anterior reunión, del 29 de diciembre, los primeros ediles rechazaron el veto que pretendía imponer el Consell al alquiler turístico en los núcleos urbanos. La propuesta del tripartito insular PSOE-Més-Podemos divide a los primeros ediles en dos frentes: Es Mercadal, Alaior, Es Castell y Es Migjorn se oponen a esta prohibición, mientras que Ciutadella, Maó, Sant Lluís y Ferreries se pronunciaron, con matices, a favor del veto en suelo urbano.

Lidera la oposición municipal a las pretensiones del Consell el alcalde de Es Mercadal, y también presidente del PSOE-Menorca, Francesc Ametller, que coloca en situación de equilibrio inestable a la presidenta del Consell y también secretaria general del PSOE menorquín, Susana Mora, en un intranquilo sinvivir. El follón del alquiler turístico y la 'revuelta de los alcaldes' no figuraba ni había sido previsto en la agenda preelectoral de 2018. Porque todas las decisiones, anuncios, convenios y visitas de consellers se realizan durante este año en mensaje para mayo de 2019.

EL DEDO ÍNDICE DE XISCU

Ametller -primero pragmático, después socialista- tuvo que recordar y advertir, dedo índice en alto, que el 70 por ciento de las casas de Es Mercadal y Fornells son plurifamiliares y que, por tanto, no se puede vetar el alquiler vacacional en los núcleos urbanos. Alaior, representado por el concejal Emilio Agis Es Castell (PP+PI), con el alcalde Lluís Camps y Florencio Conde y Es Migjorn -el alcalde Pere Moll, exPSOE, con el apoyo crítico de Ramón Verdú (PP), desde la oposición- coinciden con el alcalde de Es Mercadal y forman el frente opositor al reclamar que se autorice el alquiler en suelo urbano.

La reunión del viernes volvió a acabar con muchos nervios, acidez y todas las espaldas en alto. Tampoco fue posible el acuerdo.

En el tripartito insular, Més y Podemos hacen otra pinza para presionar a una atribulada Susana Mora e imponer una decisión a los ocho municipios porque los alcaldes tienen otros criterios.

LENTEJAS O LENTEJAS

Como los primeros ediles ven las cosas de otro color -varios propugnan el alquiler de los edificios plurifamiliares en suelo urbano para favorecer la actividad económica- el Consell les ha dado un ultimátum, con la imposición de sus medidas restrictivas.

Primera opción: Alquiler turístico en zonas turísticas, sí en suelo rústico, no y no en los núcleos urbanos, tampoco, con las excepciones de en Fornells y algunas zonas costeras (Cales Coves, Es Murtar, Sa Mesquida y Sant Esteve), pero en el resto de las zonas litorales de Menorca, prohibido.

Prosigamos. Segunda opción: si los ocho ayuntamientos 'sou bons al.lots' y pactáis, se autorizará en algunas viviendas unifamiliares aisladas. Eso sí, quedan excluidas las unifamiliares entre medianeras, y tampoco se aceptan las vivendas plurifamiliares. Esto abriría la puerta a zonas como Son Vitamina, La Argentina y Santa Ana que quedaban fuera. En suelo rústico ya os hemos dicho que no. Esto es lo que hay.

O lo tomas o lo dejas, lentejas. Al menos dos asistentes a la muy tensa reunión del viernes -en representación de sus respectivos municipios- al marchar de la sede del Consell, visiblemente enojados, soltaron el órdago: «No estamos dispuestos a tolerar estos chantajes».

Otro alcalde, mucho más molesto, preguntó en voz alta: ¿por qué no queréis autorizar en Menorca el alquiler turístico de las construcciones con uso vivienda en suelo rústico? En Mallorca estará permitido y regulado por su Consell.

Javier Pons de Marco, presidente de la Asociación de Empresarios Turísticos de Menorca (Viturme) ya ha manifestado que el alquiler turístico constituye una actividad complementaria que permite generar rentas para las fincas agrícola-ganaderas y que no debe ser prohibida en Menorca, sino ordenada. Pero se impone el 'va a ser que no'.

Hagan juego, señores alcaldes, porque la ruleta sigue girando, de momento hasta la festividad del patrón de Menorca. Continuará, mientras Susana Mora valora el coste electoral del estropicio para la cita de mayo de 2019.

EL ENIGMA DEL PUENTE

Las declaraciones de la presidenta Mora, publicadas este pasado domingo, incluyen una enigmática respuesta, que permite varias interpretaciones, a la pregunta «¿El puente de La Argentina se demolerá?». Dice Mora Humbert que «el diseño que había no está de acuerdo con el modelo insular pero somos prudentes, sin una solución técnica que lo avale no decidiremos nada». ¿Para cuándo la solucion técnica?, ¿quién la redacta?, ¿en qué consistirá la decisión final?

PREGUNTAS DE LA SEMANA

¿Logrará la Fundación Isla del Rey acreditar la propiedad municipal del enclave para obtener el 1,5 por ciento cultural?

¿Qué tipo de interés aplicará el Ayuntamiento de Es Mercadal al Govern por el préstamo de dos millones de euros para construir la nueva escuela?

¿Alguien se siente interpelado en Menorca cuando Gerardo Puente afirma que el tamaño de un municipio debe ser de 20.000 habitantes?

¿Conseguirá Dimitri Sturdza desbloquear las iniciativas que impulsa desde Mongofra?

¿Cuándo dejará de poner trabas el Ayuntamiento de Ciutadella a los proyectos de Iwan Wirth y Manuela Hauser en Son Morro?