TW
0

Mientras aguardamos la revisión del semáforo que maneja el Gobierno de Boris Johnson para definir los destinos seguros que permiten recibir turistas británicos, Grecia, Italia y Portugal han tomado la delantera a España. Autorizarán la entrada de turistas procedentes de países no pertenecientes a la zona Schengen, como Reino Unido, en los próximos días.

Grecia abre sus fronteras este sábado, día 15, al igual que Italia. Y Portugal dejará entrar turistas de fuera de la Unión Europea este próximo lunes.

España sigue bajo el manto de la Unión Europea y esperará hasta el día 20 para abrirse a determinados países emisores no comunitarios, siempre y cuando la UE modifique el listado de terceros países a los que autoriza a entrar en su territorio por motivos no esenciales.

Reino Unido no forma parte de la UE y no figura en la lista verde de países seguros para Europa, que incluye a los que tengan un máximo de 25 casos de covid por cada 100.000 habitantes. Pero aunque España permita la entrada de los británicos, Inglaterra mantiene a nuestro país fuera de la lista de destinos seguros, exclusión en vigor hasta el 7 de junio.

En todo escenario de incertidumbre, cuando nos jugamos la llegada de los visitantes británicos -el primer mercado extranjero para Menorca- y la reactivación económica con el turismo, España continua hoy sin embajador en el Reino Unido. Desde febrero el Gobierno de Pedro Sánchez carece en Londres de un interlocutor con el Ejecutivo de Johnson para poner sobre la mesa y gestionar directamente el acuerdo para desbloquear la llegada de los visitantes británicos.

No se comprende esta demora en un momento crucial, cuando deberían redoblarse los esfuerzos diplomáticos. Tampoco se ha explicado por qué el embajador de Gran Bretaña en España, Hugh Elliott, acudió hace pocos días Eivissa y Mallorca, pero no vino a Menorca.