Sí, el Gobierno es un desastre, pero el PP le iguala. Alberto Nuñez Feijóo despertó muchas esperanzas que se han ido desinflando como un globo de feria, acaso uno de sus fallos es su equipo.
Supongo que está convencido de las cualidades políticas de sus elegidos además de confiar en ellos. En mi opinión, debería de hacer una remodelación inmediata entre los cargos de su confianza porque no dan una.
No sé quién es el «listo» o «lista» a los que se les viene ocurriendo jalear a los dirigentes del PSOE que mantienen desavenencias públicas con Pedro Sánchez. Cada vez que un dirigente del PP jalea a un dirigente crítico del PSOE le está dejando a los pies de los caballos ante la militancia socialista. Y cuando además los dirigentes del PP «cultivan» a los más críticos del PSOE, les están restando toda credibilidad ante, insisto, la militancia socialista.
Cuando un «pepero» jalea a un socialista se convierte en kriptonita, es decir resta toda la fuerza a la posición y palabras que pueda decir el socialista crítico. Pues eso es lo que hacen los actuales líderes del PP cuando jalean y azuzan a los socialistas críticos, les quitan toda la autoridad moral ante la militancia socialista. Es decir, consiguen que esas críticas sean inútiles porque son rechazadas de inmediato.
Decir que muchos de los actuales dirigentes del PP, calladitos estarían mejor les puede resultar ofensivo, pero es la realidad: calladitos y dejando que los socialistas ventilen sus problemas entre ellos. Y ya puesta diré más: puede que algún día Alberto Nuñez Feijóo gane unas elecciones, pero le va a costar mucho porque realmente su acción política resulta inconsistente, tan inconsistente como es el «peso» de quienes le rodean.
Tengo la impresión de que Nuñez Feijóo no se ha rodeado de los «mejores» sino que, a la hora de elegir colaboradores, ha primado en él sentirse cómodo y confiado. Pero la verdad es que cuesta imaginar ministros entre su equipo, salvo Borja Semper, aunque lleva el camino de quemarse sin remedio.
Algunos pensarán que muchos de los ministros de Pedro Sanchez son peores que los que forman parte de la guardia de corps de Nuñez Feijóo. Tienen razón. Pero Sánchez también cuenta con dos o tres pesos pesados y sobre todo le favorece tener las riendas del poder.
Pero Nuñez Feijóo tiene que convencer, además de a sus votantes fieles, a otros muchos ciudadanos que podrían votarle y no lo hacen. Sin duda quitarse de encima a Vox es un acierto, pero no es suficiente. A la ruptura con Vox le tiene que añadir rodearse de un equipo sólido. Hoy no lo tiene. Hoy su equipo, con todo respeto, es de quinta.