Oraciones
No hay mal que por bien no venga
Dicen que no hay mal que por bien no venga, pero lo dicen por decir, ya que no hay pruebas de que tal axioma, o refrán, se haya cumplido alguna vez, ni si en tal caso el mal que trajo un bien era realmente un mal, y el bien un bien, siendo ambas cosas muy subjetivas y habiendo tanta gente incapaz de distinguirlas. Sin contar con las magnitudes en cuestión, porque si un mal de grandes dimensiones trae un bien minúsculo, con semejante desequilibrio no sé yo si se puede considerar válido el aserto. Además, se trata de una afirmación peligrosa, que a muchos llevará a pensar que cuanto peor, mejor, otra frase hecha que gran éxito cultural y político. Hay grupos y partidos que basan ahí todas sus estrategias. Y visto que nadie dice, salvo en chistes, que no hay bien que por mal no venga, y el refrán no funciona en sentido contrario violando las leyes de Newton, seguramente se trata de un axioma falso. Y sin embargo, ahora tenemos un caso asombroso que explica por qué aún hay quien cree eso de que no hay mal que por bien no venga. La maldad arancelaria del presidente de Estados Unidos logró una hazaña benéfica inverosímil y totalmente inesperada. El Gobierno y el PP se dirigieron la palabra, y hasta parece que lograron cierto acuerdo sobre la necesidad de tomar medidas para paliar los perjuicios de la guerra comercial. Inverosímil, sí señor. Esto no había pasado nunca, ni siquiera durante la pandemia, y aunque la cosa duró poco porque el PP, muy incómodo por su buen comportamiento y usando como excusa las majaderías de Junts, que se lanzó a gallear de obtener privilegios para Catalunya (lo de siempre), se echó atrás calificándolo de «cupo arancelario separatista», lo cierto es que las conversaciones no se rompieron. Ignoramos ahora qué pasará, pero que las maldades de Trump nos hayan traído aquí unos días casi civilizados, es algo prodigioso. Me recuerda las numerosas novelas y pelis de ciencia ficción en las que una invasión extraterrestre era la única posibilidad de que la humanidad no se exterminase a sí misma. El mal necesario para el bien superior. Trump es terrícola, por lo que no sé si logrará tanto. Habrá que esperar y ver si más males traen más bienes.
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