Declive sindical

Ahora, como vimos el pasado Primero de Mayo, apenas un millar de personas les apoyaron en Palma y otras ciudades de las Islas donde se convocó una manifestación, mientras la gran mayoría les dio la espada.

¿Alguien cree que en estos momentos serían capaces de convocar una huelga general contra Sánchez como lo hicieron en 1988 contra Felipe González? En absoluto, porque carecen de los principios que se necesitan para llevar a cabo una medida de estas características.

Aquellos líderes como Manolo Cámara, de CCOO, o Paco Obrador, de UGT, no se repetirán. Su compromiso con la lucha obrera desaparecerá con ellos y su dignidad y la lealtad a sus principios, no la volveremos a ver nunca más en estos sindicalistas de nuevo cuño.