Vía libre
Hasta la última gota
11/06/25 4:00
Todavía no hemos experimentado en Menorca con crudeza la realidad de que el agua se acaba, puede ser de baja calidad en muchas zonas, salir con poca presión, pero aún no ha llegado el momento de abrir un grifo en casa y solo escuchar los ruidos de las cañerías vacías, las tripas de unas conducciones secas; esa necesidad de llenar cubos de agua, durante determinadas horas del día, para más tarde distribuirla y lavarnos los dientes, el cuerpo o vaciarla parcialmente en el retrete. Así hasta que pueda brotar mágicamente otra vez del grifo, la ducha o la cisterna. Lo que son las restricciones duras que se aplican cuando se sufre una terrible sequía y el líquido elemento se agota.
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