Directo al grano: Vivimos tiempos de suspiros, embustes y caras duras. Tiempos de oscuridades y ocultaciones. Estamos rodeados de fulanas, fulanos (elijan Uds. las acepciones del diccionario que deseen), felones, embaucadores, charlatanes, sinvergüenzas astutos y sinvergüenzas lelos, bufones, histéricas y títeres subvencionados. Es época de mentirosos perfectos entre los que destacan la baturra prodigiosa, esa que engaña cada martes mientras suda la gota gorda (un signo de que en su fondo más hondo le quedará un resquicio de pudor). Sí, son tiempos de sinvergüenzas que viven a costa de las mentiras que esparcen en modo riego por aspersión como se hace en cualquier tanca menorquina no invadida por la plaga de la Placa Solar. Tiempos que sirven tanto para defender con ahínco que la amnistía es anticonstitucional como, una noche después, decir todo lo contrario una vez se ha alterado la conveniencia del momento. Y no pasa nada porque aunque siga siendo anticonstitucional, don’t worry, ‘los míos’ harán que lo sea. Y a otra cosa mariposa.
Son tiempos en los que surgen mafias que buscan afrentar a jueces y fiscales con el fin de tapar investigaciones sobre negocios y chanchullos de círculos cercanos a la religión pedrista. (‘Sobre este pedrusco edificaré mi Iglesia’). Faltar hoy a la palabra dada ya es uso normalizado en este mundo en el que ya hemos visto cabezas de caballo cortadas y ensangrentadas acostadas dulcemente al lado del traidor de turno. Es el espectáculo pedrista, una diversión macabra constante y sin coste alguno. ¡It’s all free, boys. Enjoy it!
En esta pasada Conferencia de presidentes autonómicos en Barcelona se ha evidenciado que España está emocional y sentimentalmente rota. O su política al menos. Ya no lo dice, con acierto, solo Vox sino que incluso lo declara también el sociolisto Page, el que siempre amaga pero nunca golpea. Sí, esa reunión ha colmado el vaso. Lo de los pinganillos es toda una provocación porque es absurdo de todo punto que en una reunión que preside el Rey y a la que asisten el presidente del Gobierno de España, sus Ministros y todos los presidentes autonómicos no se hable en español que es el idioma común. (‘Ponerse a hablar en catalán en una reunión en la que muchos no lo entienden es una burla. Una infamia’. (Sostres). Y una muestra de chulería y mala educación (JJ).
‘Si se monta una ridícula Torre de Babel es simplemente por la presión del marco mental que ha instaurado el separatismo (con la venia del sanchismo), no por hermosos motivos culturales. En Italia hay también idiomas regionales, y en Francia, y jamás se permitiría este dislate’ (L. Ventoso). ¿Cómo no será escandaloso que se humille al propio Rey y se le fuerce a ponerse un pinganillo para entender a un hijo de emigrantes burgaleses ahora devenido en lehendakari que no tiene, ni de lejos, 8 apellidos vascos? ¿Pero a qué estamos jugando? ¿Al fingimiento, al engaño masivo? ¿Cuándo se prohibirá, como en Francia, utilizar en la Administración y en la política nacional lenguas regionales que nos separan y debilitan como nación? Las lenguas cooficiales no deben nunca sobreponerse a su ámbito y condición regional. ¿Todavía no se han superado los tiempos oscuros en que dos andaluces, uno el cordobés Montilla, y otro, el delincuente Chaves, se querían entender desde la tribuna del Parlamento escuchando la traducción al español del otro mediante el uso del pinganillo? ¡Dos andaluces! Así fue como se inauguró la práctica usual de la estupidez supina. ¿Qué clase de respeto por las lenguas promueve alguien que se niega a hablar en una que conoce perfectamente y obliga a su interlocutor a ponerse un pinganillo?
La Torre de Babel fue impuesta por los nacionalistas al pedrusco Sánchez para apoyar su investidura y fue la moneda que pagó, ilusionada y con deleite, Armengol, nacionalista camuflada, para que aquellos separadores le permitieran acceder a ser presidenta del Congreso de los Disputados y asegurarse su futuro. ¡Qué descrédito!
Isabel Díaz Ayuso fue la única que en Barcelona se atrevió a encararse con la tolerancia suicida ante unos nacionalismos contrarios a España. ‘Con su plante en la Conferencia de Presidentes hizo ver que lo que damos por normal es profunda y lesivamente anómalo’ (El Confidencial). Y absolutamente ridículo.
‘La próxima semana hablaremos del Gobierno’ (Tip y Coll).
Notas:
1- Respeto y apoyo a Gabriel le Senne por no ceder ante las provocaciones de unas extremistas radicales.
2- Preocupaciones ciudadanas: El ciudadano se preocupa según las informaciones que se le suministran.
3- Y dijo la fontanera: «Se puede ser periodista y socialista». ¡Pues vaya novedad!
4- Mientras uno se entretenía con las Jésicas, Cláudias y Miss Asturias, otro tenía que conformarse con la Leire.
5- El mejor audio del año, el de una voz susurrante: !Aldama-Aldama-Aldama!... ¡Qué viene Aldama! ¡Aldama! ¡Qué viene Aldama... Y se montó, claro.
6- El mahonés vivo más representativo y eficaz acaba de cumplir 84 años en perfecto estado de revista. Felicidades y un abrazo.
7- Nerviosismo en el socialismo balear a causa del nombramiento de Aina Calvo como nueva Secretaria de Estado de Seguridad hasta el punto de que, según informa Vozpopuli, la cúpula del partido ni la felicitó. ¿Primer paso para sustituir a una Armengol pringada por una confusa compra de mascarillas? Eso podría cambiar todo el organigrama del PSOE balear.