Imagen del histórico encuentro de los mandatarios en la zona norcoreana. | KEVIN LAMARQUE

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El presidente estadounidense, Donald Trump, se ha visto en la frontera intercoreana con el líder norcoreano, Kim Jong-un, un breve encuentro cargado de simbolismo histórico y destinado a reactivar el diálogo entre las dos Coreas.

Es la primera vez que líderes de EE UU y Corea del Norte se reúnen en esta frontera y además Trump ha cruzado la línea divisoria y se ha convertido en el primer presidente estadounidense que pisa jamás territorio norcoreano.

Trump ha salido primero del edificio conocido como Freedom House, situado en el sur de la Zona de Seguridad Conjunta (JSA), en el corazón de la zona desmilitarizada (DMZ) que divide ambas Coreas, que permanecen en guerra desde los cincuenta.

Kim se ha aproximado desde el pabellón Panmungak, el lado norte de la JSA, y se ha dirigido a la línea de demarcación militar (MDL), donde le esperaba Trump.

Tras saludarse con un apretón de manos han intercambiado unas breves palabras, con Kim diciendo: «Me alegro de verle de nuevo. No esperaba verle jamás en este lugar».
A continuación Trump ha cruzado la MDL y ha hecho historia.

Tras unos instantes ambos han cruzado de nuevo hacia la franja sur de la JSA, donde han hablado brevemente con la prensa.

«Se trata un momento histórico que pretende poner fin al conflicto en la península», ha dicho Kim, que ha calificado el gesto de Trump «valiente».

El presidente estadounidense ha dicho que «están pasando cosas muy positivas» en la península a raíz del acercamiento entre Washington y Pionyang iniciado el año pasado.

«Nos hemos reunido y nos gustamos el uno al otro desde el primer día y eso es lo que importa», añadió.

Tras otro apretón de manos, Kim ha saludado al presidente surcoreano, Moon Jae-in, que también ha acudido a la frontera.

Fin al conflicto

El líder norcoreano, Kim Jong-un, aseguró este domingo durante su encuentro con el presidente estadounidense, Donald Trump, en la frontera intercoreana que «se trata un momento histórico que pretende poner fin al conflicto en la península» coreana.
Kim ha calificado el gesto de Trump «valiente», poco después de que el mandatario de EEUU dijese que va a invitar al líder norcoreano a visitar Washington.

«Le voy a invitar ahora mismo a la Casa Blanca», ha dicho Trump tras encontrarse con Kim en la frontera y momentos antes de que ambos iniciaran una reunión privada junto a la línea divisoria.

La oferta fue hecha en el encuentro que tuvieron ambos gobernantes antes de que entraran a una sala para celebrar una cumbre informal, en el lado surcoreano de la frontera, en un edificio conocido como Freedom House.