Protesta de solidaridad con Gaza. | Reuters - WAEL HAMZEH

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El Gobierno alemán anunció este miércoles que retomará en breve la cooperación con la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) después de que ésta declarara que implementará «de forma rápida y plena» las recomendaciones del informe independiente encargado por la ONU para mejorar su funcionamiento. «En este contexto y en apoyo de estas reformas el Gobierno alemán continuará en breve su cooperación con la UNRWA en Gaza, como ya han hecho Australia, Canadá, Suecia y Japón, entre otros», informaron el Ministerio de Asuntos Exteriores y el de Cooperación Económica y Desarrollo.

El comunicado conjunto agrega que Alemania coordinará estrechamente con sus socios internacionales más cercanos el desembolso de más fondos y señala que las necesidades de financiación a corto plazo de la UNRWA en Gaza están cubiertas actualmente por los fondos existentes. Al continuar con esta cooperación urgente Alemania apoya «el papel vital y actualmente insustituible de la UNRWA» en la prestación de ayuda a la población de Gaza, ya que también otras organizaciones humanitarias internacionales dependen actualmente de las estructuras operativas de esa Agencia de la ONU, señala.

En este sentido, Alemania indica que las recomendaciones del informe encargado a una comisión presidida por la exministra de Exteriores francesa Catherine Colonna «deben aplicarse ahora sin demora». El Gobierno alemán recuerda que el G7 subrayó recientemente que UNRWA y otras agencias de la ONU deben ser capaces de cumplir plenamente su mandato de distribuir ayuda humanitaria en Gaza y resalta que «esto es más importante que nunca en vista de la persistente catástrofe humanitaria en Gaza». El comunicado agrega que el Gobierno alemán ha analizado intensamente las acusaciones vertidas por Israel contra la UNRWA y ha estado en estrecho contacto con el gobierno israelí, las Naciones Unidas y otros donantes internacionales.

Por su parte, el Congreso de los Diputados aprobó este pasado martes una proposición no de ley (PNL) del Grupo Socialista por la que se insta al Gobierno de España a apoyar a la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Próximo y a impulsar en la UE que sigan apoyando a la agencia de la ONU e incrementen sus aportaciones. La propuesta del PSOE contó con el apoyo de todos los partidos salvo del PP, que se abstuvo, y de Vox, que la rechazó por considerar que es «de vergüenza ajena».

Se trata, según la diputada socialista María Guijarro en su defensa de la propuesta, de que la ayuda de la comunidad internacional llegue de manera «suficiente, urgente y eficaz» a la agencia de la ONU para los refugiados palestinos porque, si no lo hace, la urgencia humanitaria pondrá en peligro «el día después del alto el fuego». A la PNL del PSOE se ha incorporado una enmienda de Sumar quien ha asegurado que las acusaciones de Israel contra 12 trabajadores de la organización no buscan sino su desaparición, para así acabar con el estatus de refugiado de los palestinos.

En su defensa de la posición de Sumar, el diputado Javier Sánchez ha asegurado que, al boicot a la UNRWA de Israel se han sumado «Estados Unidos y ese occidente hipócrita hasta la náusea» que apoya el «todo vale» si quien lo propone es Washington. Sánchez también ha criticado la política del Gobierno que «sigue instalado en las apariencias y la ambigüedad» y silencia los ataques en el Mar Rojo, no apoya a Sudáfrica en su denuncia ante la Corte Penal Internacional y no ha roto relaciones políticas o comerciales con Israel, a quien sigue vendiendo armas.

Por su parte, el PP ha respaldado la labor de la UNRWA pero ha señalado que «lo más coherente y razonable» es mantener el mismo posicionamiento de la UE de apoyo al pueblo palestino, que los palestinos inocentes no deberían pagar por los hechos de Hamás, y un refuerzo económico a la región de Gaza que «esté bien gestionada, llegue a sus destinatarios y cumpla los fines para los que fue concedida». El Grupo de Vox ha puesto el foco en que la ayuda destinada a Gaza y otras partes del mundo «no acabe en otras manos o se destine a otros fines», para lo que ha pedido que se establezcan sistemas de verificación y auditoría, así como una revisión de los proyectos concretos y de las ONG que los gestionan para asegurarse de que se opongan al terrorismo y a las redes de inmigración ilegal.