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El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, se mostró ayer partidario de prorrogar la ayuda de 420 euros para desempleados que hayan perdido la prestación o el subsidio, al tiempo que auguró que el paro seguirá subiendo en 2010 aunque de forma más atenuada.

Corbacho, que compareció ayer de forma extraordinaria, a petición propia y del PP, en la Comisión de Trabajo e Inmigración del Congreso, dijo que el Programa Temporal de Protección por Desempleo e Inserción, que incluye la ayuda de 420 euros, debe continuar, porque las causas que impulsaron al Gobierno a adoptar esta medida no han desaparecido aún e incluso "han empeorado".

No obstante, precisó que la ayuda no debe mantenerse para las mismas personas que ya la percibieron y dijo que quienes ya no la tienen y no trabajan deberían acogerse a las rentas de inserción social de las comunidades autónomas.

También auguró que el paro seguirá subiendo en 2010, aunque la situación en enero de este año "se parecerá más" a la que había en 2008 (cuando subió en 132.378 personas en enero) que a la de 2009 (cuando aumentó en 198.838).

Corbacho puntualizó que todavía no se puede dar por concluido el periodo de destrucción de empleo, aunque matizó que "estamos en las fases finales de esa destrucción de empleo".

Durante su comparecencia, anunció que el Gobierno dispone de 292 millones de euros en 2010 para bonificar la contratación de jóvenes, discapacitados y mujeres afectadas por violencia de género, para estimular el empleo.

Así, adelantó una parte del informe sobre bonificaciones a la contratación, contenidas en el proyecto de Ley de Fomento y Mantenimiento del Empleo, que presentará el Ejecutivo en el Congreso, con sus propuestas de reforma laboral.

También se refirió a que más de 362.000 trabajadores se han beneficiado de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) de suspensión como alternativa al despido.
El ministro recordó que entre agosto de 2008 y abril de 2009 se produjo la parte de la crisis "más grave de los últimos 80 años", que amenazó con colapsar el sistema financiero y la economía mundial y que originó que en 2009 hubiera 784.000 parados más.

La mayoría de los grupos parlamentarios en el Congreso reprocharon a Corbacho la falta de medidas concretas para combatir la destrucción de empleo, el "laconismo" de su discurso y la "tardanza" en su comparecencia en esta Comisión.

El diputado del PP Ignacio Echániz criticó que el ministro no haya comparecido desde agosto y le acusó de no haber hecho "absolutamente nada" para crear puestos de trabajo.