Instalación. Zapatero ayer durante la inauguración del sincrotrón Alba en Cerdanyola del Vallès - Reuters

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El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró ayer que con el sincrotrón Alba España deja "atrás páginas de historia" en las que se decía que "inventen otros" y afianza su posición en "la primera división" científica, y es un buen ejemplo de para lo que sirven los impuestos.

Alba "afianza" a España en "la primera división de la ciencia de los países europeos", remachó Zapatero, quien hizo estas manifestaciones, junto al jefe del Ejecutivo catalán, José Montilla, y la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, en la inauguración del sincrotrón Alba (Cerdanyola del Vallés), un acelerador de partículas cuya importancia actual es equiparable a la que supuso la invención del microscopio para la ciencia en su día.

En su discurso, el presidente del Gobierno afirmó que esta instalación ha sido concebida para la "excelencia", y deja atrás una historia en la que se vivía "bajo la sensación de que inventen otros -sacado de una frase de Miguel de Unamuno- o con la afirmación de que España había vivido de espaldas a la ciencia durante siglos". Alba, de la que dijo que le encanta su nombre, el mismo que el de una de sus hijas, ofrecerá, además, a las empresas un "inmejorable instrumento" para hacer innovación, con lo que se podrá superar ese "gap" que existe en la inversión privada en I+D.

En este sentido, Zapatero valoró el esfuerzo de la inversión pública y, si bien el gasto privado crece en un diez por ciento anual, es "insuficiente" para alcanzar el ritmo que se desea.

Esta instalación, "fruto del cambio de paradigma que se ha producido en España en los últimos años sobre el valor estratégico de la I+D", muestra, asimismo, la "capacidad acreditada" de Cataluña para la puesta en marcha de este tipo de iniciativas. Alba, con una inversión de 400 millones hasta 2022, nace, según Zapatero, en un mes importante para la ciencia española, porque el pasado 12 de marzo el Consejo de Ministros aprobó el anteproyecto de la ley de Ciencia.

Garmendia coincidió con Zapatero en que este sincrotrón coloca al país en la "liga de los campeones". Por su parte, Montilla indicó que Alba es una "afirmación rotunda" del camino que ha de seguir la economía y es una "pieza clave" que "nos conecta con la vitalidad del país".