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El Euribor, tipo de interés al que se conceden la mayoría de las hipotecas en España, subió ayer una milésima en tasa diaria, hasta situarse en el 1,212 por ciento con lo que cerró marzo en la cota del 1,215 por ciento y marcó un nuevo mínimo histórico. El indicador sumó así tres meses seguidos de descensos, después de romper en diciembre la senda bajista de catorce meses consecutivos. De este modo, el índice recortó en 0,10 puntos el nivel de febrero (1,225 por ciento) y registró un descenso de 0,69 puntos respecto a marzo de 2009 (1,909 por ciento).

La caída del indicador abaratará de nuevo la cuota de las hipotecas que los consumidores pagan mes a mes. En concreto, para una hipoteca media de 120.000 euros, a un plazo de 25 años y con un diferencial de 0,80 por ciento, las familias pagarán 509 euros al mes, frente a los 550 euros que pagaron en marzo de 2009. Esto supone un ahorro de 41 euros al mes y de casi 500 euros al año.

En el caso de las hipotecas con revisión semestral, la caída será de solo 7 euros, y el recorte anual no llegará a 100 euros. El índice se acercó cada vez más al suelo fijado por la mayoría de los expertos en el 1,20 por ciento. Sin embargo, a pesar de que el índice continuó bajando, moderó sensiblemente su caída ya que en lo que va de año solo descendió en 0,03 puntos, frente al retroceso de 1,54 puntos que registró en los tres primeros meses del año. A pesar de que el descenso será cada vez menor, los analistas subrayaron que el retraso en la subida de tipos de interés, prevista para principios de 2011, permitirá al indicador alargar la senda bajista hasta el verano.

A partir de esta fecha, consideraron que el indicador podría mantenerse para comenzar a subir, salvo que se produzca algún hecho que afecte al mercado interbancario que modificase este escenario. En este sentido, el sector ya comenzó a descontar la subida de los tipos de interés el próximo año y la retirada de las medidas de liquidez del BCE.