Comparecencia. Cándido Méndez y Ignacio Fernández Toxo - EP

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Los sindicatos CCOO. y UGT consideran que la actitud del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de sostener que no se va a modificar aspectos como la reforma laboral o los planes de aumentar la edad de jubilación son "un graso error" y amenazan con que se mantenga un "clima de conflicto social" prolongado en el tiempo. Además, se mostraron convencidos de que la huelga general tendrá sus efectos y generará cambios en las políticas.
Así lo indicaron ayer el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y su homólogo en UGT, Cándido Méndez, durante una comparecencia de prensa con motivo de la adhesión del Consejo de la Juventud a la convocatoria de huelga general del 29 de septiembre. En el acto también estuvo presente el presidente del Consejo de la Juventud de España, Ricardo Ibarra.

Para Toxo, la reforma laboral y otras medidas emprendidas por el Ejecutivo "amenazan con conseguir que se enquiste" una tasa de paro del 20 por ciento "por un largo tiempo" y apostilló que tradicionalmente la convocatoria de huelga general tiene efectos a la hora de cambiar las políticas sociales y laborales. "Cambiarán las reformas, cambiarán las políticas o cambiará el Gobierno", remarcó luego.

Por su parte, Cándido Méndez aseguró que "la vida no va a seguir igual después de la huelga" para añadir que "en lo que queda de legislatura va a tener que coexistir con un malestar social que se va a seguir manifestando". "Si insiste en la reforma del sistema de jubilación, peor", incidió el secretario general de UGT quien aventuró también que dicha reforma laboral la va a "impugnar de forma democrática" la población y ello va a llevar al presidente a "modificar".
Para ambos dirigentes sindicales, Zapatero se ha instalado con esta reforma laboral en "la resignación" y en la renuncia en los objetivos de generación de empleo y reducción de temporalidad. Además, en opinión de Méndez, el presidente con sus declaraciones "intenta mantener los ojos cerrados" ante el "monstruoso error" de la reforma laboral.

Para el secretario general de CCOO, las manifestaciones de Zapatero referentes a su determinación de mantener la reforma laboral, a pesar de las protestas sindicales, es "un intento de darse ánimos a sí mismo y un mensaje de desánimo para la sociedad", algo que interpretó como un "vano intento" porque en su opinión la población le dirá "alto y claro" en la huelga general que "se pueden hacer otras políticas".
Sobre la intención de aumentar la edad de jubilación hasta los 67 años, ambos dirigentes afirmaron que el presidente del Gobierno ha realizado un giro a sus políticas lo que ha generado malestar en la sociedad. En este aspecto, Toxo alertó que una reforma de la Seguridad Social alejada del Pacto de Toledo sería un "tremendo despropósito" y "un auténtico disparate" mientras que Méndez dijo que Zapatero ha dado un "volantazo brusco" a su política social con la congelación de pensiones.

En relación a la situación laboral de los jóvenes, ambos dirigentes sindicales consideraron que la reforma laboral es negativa para este colectivo, pues generará una situación de mayor precariedad laboral, un contexto de salarios bajos y un retraso en las posibilidades de emancipación.
Al respecto, Toxo comentó para ilustrar la mala situación laboral de los jóvenes que la tasa de temporalidad en este colectivo se sitúa en un 45 por ciento y que con la crisis la franja de temporalidad ha aumentado para ellos entre 2009 y 2010.

Además, el secretario general de CCOO recordó que la tasa de paro para menores de 30 años ronda el 30 por ciento, aunque esa cifra se eleva hasta el 65 por ciento si se refiere a personas entre 16 a 20 años, mientras que hasta los 24 años se coloca en el 40 por ciento.

"El paro azota a los jóvenes de una forma más acusada", enfatizó Toxo quien auguró también de que, si se mantienen más tiempo esta situación, se puede hablar "de una generación perdida". También incidió en el actual contexto pueden generar "ghetos laborales" en jóvenes e inmigrantes e insistió en que la reforma laboral condena a los jóvenes "a ser mano de obra de segundo nivel".
Por su parte, Méndez criticó la situación en la que ha quedado el contrato de formación con la reforma laboral y ha subrayado que las políticas empresariales y gubernamentales para los jóvenes son la "historia de un fracaso", sobre todo si se tiene en cuenta que "la cifra más dura de paro" en este trimestre es que casi la mitad de los parados son jóvenes.