Las tropas sirias han desplazado tanques y helicópteros hacia la localidad de Maarat al Numaan, en el norte del país, después de detener a cientos de personas en pueblos cercanos a Jisr al Shugour, de donde han huido miles de personas hacia Turquía.
Más de 8.500 sirios han buscado refugio en el país vecino para huir de la ofensiva emprendida en la zona norte de Siria por el régimen de Bashar al Assad, que ha reprimido con dureza las protestas antigubernamentales.
La mayoría de estos desplazados han huido de Jisr al Shughour, a 20 kilómetros de la frontera. Según la versión del Gobierno, 120 efectivos de seguridad fueron abatidos en esta localidad hace diez días. Además, algunos activistas han declarado que residentes y tropas disidentes se han enfrentado en esta área con las fuerzas leales a Al Assad.
El Ejército se hizo este domingo con el control de Jisr al Shughour y ahora aparentemente se dirige hacia Maarat al Numaan, de importancia estratégica porque junto a ella se encuentra la principal autopista que comunica la capital siria, Damasco, con la segunda ciudad del país, Alepo, donde también se han registrado manifestaciones.
Un profesor de Farmacia residente en Maarat al Numaan, Othman al Bedeiwi, ha denunciado que el Ejército está desplazando tropas en helicópteros al campamento de Wadi al Deif, a escasos kilómetros de la ciudad.
El gobernador provincial ha asegurado a la población local que el Ejército sólo entrará en la ciudad "para arrestar a 360 personas que tiene en una lista", aunque, como ha reconocido Al Bedeiwi, la gente de la zona es "escéptica". "Mi nombre está en esta lista para ser arrestado por ser un pistolero", ha denunciado la fuente, quien ha sostenido que "nunca" ha portado un arma.
Turquía ha levantado cuatro campamentos de refugiados en la frontera y ya acoge en esta zona a más de 8.500 personas, según datos de la agencia de noticias estatal Anatolia.
Grupos pro Derechos Humanos han dicho que, desde el arranque de las revueltas en marzo, han fallecido más de 1.300 civiles. El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos ha sumado a estas cifras el fallecimiento de más de 300 soldados y policías.
La agencia Anatolia también informó ayer de una llamada telefónica entre Al Assad y el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, cuya formación, el Partido Justicia y Desarrollo (AKP), resultó vencedora en las elecciones del domingo. En esta conversación, el primer ministro le pidió a su interlocutor que no utilice la fuerza contra los manifestante y emprenda reformas cuanto antes.
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