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El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, afirmó ayerque actualmente el Gobierno no proyecta reducir el sueldo de los funcionarios ni acometer privatizaciones. Respecto a las empresas públicas, el ministro 'popular', considera "fundamental" eliminarlas, ya que "dan lugar a todo tipo de corruptelas".

Durante la celebración en Málaga del Forum Europa-Tribuna Andalucía, Montoro señaló que el Gobierno de Mariano Rajoy "no tiene ningún proyecto de reducir los sueldos de los funcionarios". Es más, agregó que si esto se hiciera, "nos haría caer más y se desplomaría la confianza que ya sufre la sociedad española".

El ministro incidió en que su papel como responsable de Administraciones Públicas es "revalorizar" la función pública, "y en crisis no hay otra manera de hacerlo que no sea la del trabajo, el compromiso con la calidad del servicio público y con la puesta al día del contenido de su función".

En este sentido, Montoro criticó que se "desvirtúe" el papel del funcionariado y recalcó que se quiere "proyectar" la función y el futuro de estos trabajadores, a los que pidió que entiendan que hay que salir de la crisis económica actual "con más trabajo, no con menos". "Tener un puesto no es tener un puesto asegurado de por vida, sino que lo tengo para trabajar en un servicio público", sostuvo.

A su juicio, estos trabajadores "son los primeros en trabajar eficientemente en los servicios públicos"; por ello, indicó que el trabajar hora y media más a la semana "es para promover un servicio más eficiente y la mayoría entienden el valor de su tarea".

Respecto a posibles privatizaciones, el titular de Hacienda y Administraciones Públicas ha manifestó en el mismo foro que actualmente el Gobierno "no tiene empresas estratégicas en términos de actividad económica" para llevar a cabo este tipo de medidas. "Sí las tenía en los años 90 y salieron muy bien", dijo, en referencia a las que se realizaron en Telefónica, Repsol, Endesa, Iberia o Argentaria, "pero no se hicieron para hacer caja, sino para cambiar la estructura de nuestra economía".

Las privatizaciones, aseguró Montoro, "no reducen el déficit público, que es el problema de España, sino que son para incrementar la competencia en los sectores estratégicos".