Habitantes. El Instituto Nacional de Estadística prevé un 10 por ciento menos en 2052 - Archivo

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El número de población en España descenderá este año por primera vez desde 1981, al pasar de los 46.196.278 millones (a 1 de enero de 2012) a los 46.094.454 proyectados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) para el 1 de enero de 2013. Esta cifra alcanzaría en 2052 los 41,5 millones de habitantes, un 10,2 por ciento menos que en este 2012.

Así, el estudio 'Proyecciones de Población a corto plazo (2012-2022) y a largo plazo (2012-2052)', señala que, de mantenerse la tendencia demográfica actual, España contaría en 2022 con 45,0 millones de habitantes, un 2,5 por ciento menos que este año.

Además, prevé que España registrará "un paulatino descenso de la natalidad" en los próximos años, ya que en 2021 nacerían 375.159 niños, casi un 20 por ciento menos que en el último año, y hasta 2031 se registrarían 7,7 millones de nacimientos, un 9 por ciento menos que en los últimos 20 años.

Este descenso de nacimientos vendría determinado por "una progresiva reducción" del número de mujeres en edad fértil, según el INE. Por ello, el número de nacidos no volvería a crecer hasta 2030, aunque volvería a decrecer a partir de 2040. En cualquier caso, en los próximos 40 años nacerían en España 14,6 millones de niños, un 24 por ciento menos que en los últimos 40.

Además, el número medio de hijos por mujer se situará en 1,51 en 20 años y en 1,56 en 40, frente a los 1,36 de 2011. A su vez, con la tendencia actual, la edad media a la maternidad llegaría a los 31,5 años en 2051. Mientras, la evolución de la curva de tasas de fecundidad por edad de la madre se desplazaría hacia edades más altas (entre 35 y 40 años) así como a tasas más elevadas de fecundidad de mujeres de entre 18 y 25 años.

Por otro lado, el INE puntualiza que, de mantenerse los ritmos actuales, la esperanza de vida alcanzaría los 86,9 años en los varones y los 90,7 años en las mujeres en 2051, lo que supone un incremento de casi ocho años y de seis años, respectivamente, con respecto a la cifra actual.

El envejecimiento de la población provocará que los mayores crecimientos de población se concentren en edades avanzadas. En concreto, en 2052 el grupo de edad de mayores de 64 años se incrementaría en 7,2 millones de personas (un 89 por ciento) y pasaría a constituir el 37 por ciento de la población total. Por el contrario, España perdería 9,9 millones de personas de edades comprendidas entre 16 a 64 años (un 32 por ciento) y casi dos millones en el grupo de población de 0 a 15 años (un 26 por ciento).

Por ello, de mantenerse las tendencias y comportamientos demográficos actuales, en 2022 la tasa de dependencia se elevaría hasta el 58 por ciento, Es decir, por cada 10 personas en edad de trabajar, en 2022 habría casi seis potencialmente inactivas. En 40 años, esta tasa de dependencia se elevaría al 99 por ciento, por lo que por cada persona en edad de trabajar prácticamente habría otra que no estaría en edad de hacerlo.

Defunciones

Además, una estructura demográfica cada vez más envejecida produciría un continuo crecimiento del número anual de defunciones por lo que el INE vaticina que, en los próximos 40 años, morirían en España unos 17,9 millones de personas, un 34 por ciento más que en los últimos 40, resultando decreciente el saldo entre nacimientos y defunciones.