El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, justificó ayer ante la cúpula del PP la subida de impuestos realizada por su Ejecutivo en contra de su promesa electoral, recalcando que el año pasado España estuvo "a punto del crack" y era necesario una política de mayores ingresos. Dicho esto, señala que, en cuanto pueda, bajará los impuestos, con el 2015 como tope.
En su intervención a puerta cerrada, Rajoy subrayó que el Gobierno bajará los impuestos cuando pueda, pero recalcó que la prioridad del año pasado y del presente era evitar la intervención. "Cuando sea posible con el 2015 como tope, los impuestos volverán a la situación anterior, al menos los más importantes", según relató la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal.
Así, Rajoy insistió en que no querían subir los impuestos, pero el riesgo de rescate que el año pasado padeció la economía española le obligó a una política de mayores ingresos para ahorrar 22.000 millones de euros: 20.000 procedentes de la reducción del gasto y 2.000 por la subida de impuestos.
Por otro lado, Mariano Rajoy también aprovechó su intervención ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP para pedir a la cúpula de su partido que haga un esfuerzo de "pedagogía", para explicar mejor a los ciudadanos las "duras" y "complicadas" medidas que está llevando a cabo el Ejecutivo para salir cuanto antes de la crisis económica.
"Rajoy ha dicho que cuando las medidas son complicadas, hay que hacer mucha pedagogía para explicarlas entre todos. Creo que eso es muy importante", declaró Dolores de Cospedal en la rueda de prensa posterior.
La 'número dos' del PP insistió en que, cuando un Gobierno tiene que tomar "decisiones complicadas, duras e impopulares" y pone "el interés del país por encima del propio interés del partido", hay que "explicar mucho". Según añadió, Rajoy considera que esa labor de pedagogía debe realizarla todo el partido y todo el Gobierno.
La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, pidió a Rajoy que aproveche que la UE ha relajado el déficit hasta el 6,3 por ciento del PIB para utilizar esa "holgura" en una rebaja del IRPF. Esa "holgura", subrayó, podía ser aprovechada tanto para devolver confianza a los ciudadanos como para, por este camino, volver a la creación de empleo y el crecimiento.
¡"A mí me ha parecido que lo que ha explicado quizá deberíamos haberlo explicado el primer día, pero nunca es tarde si la dicha es buena", aseguró.
Al hilo de la intervención, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se encaró con Esperanza Aguirre, a la que le reprochó sus críticas en materia fiscal, y añadió que el Gobierno bajará los impuestos en cuanto pueda, como ya hizo en 1999, porque son los mismos que gobiernan y piensan lo mismo sobre la conveniencia de bajarlos, según informaron a Europa Press fuentes 'populares'.
Montoro pidió la palabra, además, para recordar que, cuando el PP ganó las elecciones en 1996, tardaron tres años en bajar los impuestos a los ciudadanos y recordó que la propia Aguirre estaba en ese Ejecutivo del PP.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, también replicó a la líder del PP de Madrid reprochándole que, para bajar el IRPF, sería del todo necesario tocar las prestaciones de paro y las pensiones.
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