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La tímida recuperación económica en el mundo desarrollado no va a permitir un descenso del paro en la OCDE ni este año ni buena parte del próximo, e incluso seguirá aumentando en algunos de los países, en particular en algunos de los periféricos de la zona euro, como España.

En su informe anual de Perspectivas del Empleo publicado hoy, La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), subrayó la evolución contrastada de sus 34 miembros, que tenían en conjunto una tasa de desempleo del 8 por ciento en mayo, que pasaría al 7,8 por ciento en el último trimestre de 2014.

Eso se traduce en que en mayo había más de 48 millones de personas que buscaban trabajo -es decir, 16 millones más que cuando se inició la crisis a finales de 2007- y que la recesión en que ha vuelto a caer la eurozona es la que explica en gran medida la mala situación del empleo.

Globalmente, el paro en la moneda única se incrementará del 12,2 por ciento en mayo al 12,3 por ciento a fines de 2014, pero incluso en su interior las situaciones van a diferir mucho, ya que Alemania, con un desempleo del 5,1 por ciento en mayo, estaba ya mejor que al comienzo de la crisis, y en el último trimestre del próximo ejercicio ese porcentaje se habrá reducido al 4,7 por ciento.

La otra cara de la moneda son Grecia y España, con un desempleo del 26,8 por ciento y del 26,9 por ciento respectivamente en mayo, en ambos casos más de 18 puntos por encima del nivel que tenían a fines de 2007.

Y sobre todo, la OCDE calcula que en ambos casos el paro va a continuar progresando al menos hasta finales de 2014, cuando será del 28,2 por ciento en Grecia y del 27,8 por ciento en España.

"Es una tragedia social", subrayó el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, quien hizo notar que fuera del Viejo Continente -donde hay unas pocas excepciones, como la citada de Alemania-, hay países como México, Estados Unidos o Japón donde el porcentaje de los que no encuentran trabajo disminuye "gradualmente".

Gurría constató que "la crisis ha sido particularmente dura con los jóvenes", con tasas de paro que en esta categoría superan el 40 por ciento en Italia o Portugal, que llegan al 55 por ciento en España o al 60 por ciento en Grecia, una cifra "enorme".