Alfredo Pérez Rubalcaba, Francina Armengol y Pere Navarro en el acto de clausura - Efe

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El PSC y el PSOE exhibieron ayer domingo unidad durante un acto en Barcelona tras meses marcados por sus discrepancias sobre el 'derecho a decidir', y sus líderes, Pere Navarro y Alfredo Pérez Rubalcaba, reivindicaron juntos la Constitución y su reforma federal.

El líder del PSOE elogió el papel de Navarro para situar el federalismo en la agenda socialista: «Si no hubiera defendido con tenacidad sus ideas en el seno del PSOE no estaríamos hablando aquí de federalismo. Gracias por tu trabajo, por empeñarte en buscar una solución y por tus ideas».

Rubalcaba recordó la escena de la reciente Conferencia Política del PSOE, cuando Navarro se emocionó al ovacionarle el auditorio, y lo considera una muestra de «humanidad» de alguien al que le satisface ver unido al socialismo.
Dijo que el también se emociona cuando ve que «los socialistas van juntos», que es su diagnóstico sobre la situación actual del socialismo catalán y español, y apeló a que esta unidad sirva para defender la reforma de la Constitución, entre otras cuestiones.

Los elogios de Rubalcaba --que empezó su intervención con un 'bon dia'-- también fueron para el conjunto del PSC: «Os hablo en nombre del PSOE: cariño, afecto y respeto a como sois; os queremos como sois. Vamos a seguir juntos porque somos la garantía de la convivencia».

Antes de su discurso, Navarro ya había agradecido a Rubalcaba que el PSC es consciente de que hay «un gran partido en toda España» que apuesta por las tesis federales, y que la unidad del socialismo servirá para lograr sus objetivos: derrotar a la derecha y reformar la Constitución.

Aunque mantienen su principal discrepancia --que el PSC defiende una consulta legal y acordada con el Estado pero el PSOE no--, ayer en Barcelona pasaron de puntillas por esto, centrándose en lo que les une: la reforma federal de la Constitución.

Bajo el título 'La solución es federal', el PSC logró llenar el pabellón de la Vall d'Hebron, y, según la organización, 3.000 personas se citaron para ver a Rubalcaba y a Navarro.