El presidente Pedro Sánchez en la entrevista en Espejo Público este lunes. | Redacción Digital

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado este lunes que habrá una revisión a la baja de la previsión de crecimiento del PIB para este año (7%) por el impacto de la guerra de Ucrania en la economía española, aunque ha insistido en que el crecimiento seguirá siendo «robusto». «Es evidente que la guerra de Putin en Ucrania está teniendo un impacto no sólo en la economía europea sino también en la economía global y que va a haber una revisión a la baja de las cifras de crecimiento del PIB en España, Europa y el mundo es una certificación, pero eso no significa que no vayamos a crecer», ha subrayado el presidente en una entrevista en el programa 'Espejo Público, de Antena 3, recogidas por Europa Press. Sánchez ha subrayado que España seguirá creciendo de manera «robusta» y creando empleo, con una cifra que ahora mismo ronda o supera los 20 millones de ocupados, «muy pocas veces vista a lo largo de la historia de la afiliación a la Seguridad Social». Sin embargo, ha señalado que hay «amenazas e incertidumbres» sobre la evolución de la economía, entre ellas la guerra y su impacto sobre los precios energéticos y las materias primas.

El jefe del Ejecutivo ha asegurado que «no se escuda» en la guerra «ni pone paños calientes» a la situación económica, pero ha considerado «evidente» que el 70% de la subida del IPC se debe a los precios energéticos y de los alimentos no elaborados, y eso, ha añadido, «tiene mucho que ver con el conflicto en Ucrania». Precisamente, para combatir los altos precios energéticos, ha recordado que España está «en plena negociación» con Bruselas para desacoplar el precio del gas del precio de la electricidad en el mercado ibérico, lo que repercutirá en una rebaja de la factura eléctrica, y espera que esta medida pueda cerrarse cuanto antes con la Comisión Europea. «Hay que reformar el mercado energético en Europa, porque no tiene ningún sentido que la evolución del precio del gas explique la evolución del precio de la electricidad. Tenemos que crear un precio de referencia para que ese alza no impacte en la factura», ha defendido Sánchez.

Mientras tanto, ha explicado que el Gobierno ha puesto en marcha un plan de respuesta a la crisis con medidas por valor de 16.000 millones de euros y ha insistido en la necesidad de seguir trabajando en la transición energética verde, pues, según ha resaltado, la apuesta por las renovables «es la solución» a la alta dependencia europea de Rusia. Preguntado por 'los beneficios caídos del cielo' de las eléctricas, que en España se han recortado para rebajar la factura de la luz, Sánchez ha considerado «evidente» que existen, pese a que las eléctricas lo nieguen. «Si produces a precio de energía renovable y cobras al precio del gas es evidente que algún beneficio te estás llevando. Lo venimos diciendo en Bruselas desde septiembre del año pasado y hubo entonces empresarios y analistas diciendo que la decisión que había tomado (la de recortar estos beneficios) era poco menos que chavista. Pero hoy forma parte de la hoja de ruta de la Comisión Europea y lo están implementando muchos países europeos», ha subrayado Sánchez.

Así, el jefe del Ejecutivo ha destacado que España ha estado «a la vanguardia» en el recorte de estos beneficios, «como también lo ha estado desde el principio de la crisis energética en plantear la necesidad de reformar a fondo un sistema energético en Europa que no está funcionando». «Igual que intervenimos los mercados financieros cuando no funcionaron en épocas pasadas, tenemos también que intervenir en los mercados energéticos cuando claramente no están funcionando. Lo estamos haciendo a nivel ibérico, en esa negociación con Bruselas, y la aspiración que tenemos desde el Gobierno de España es que haya un acuerdo a 27 para reformar el mercado energético", ha afirmado.

Inflación «coyuntural», pensiones garantizadas

Pese al repunte del IPC, el presidente ha señalado que las previsiones de los organismos internacionales, incluido el Banco de España, apuntan a que la actual situación de precios es «coyuntural», derivada de la guerra en Ucrania, pues la inflacion bajará en 2023 de manera «brusca y abrupta», hasta el entorno del 2%. En todo caso, y respecto a la revalorización de las pensiones, ha garantizado su actualización conforme a la inflación, ya que así está establecido por ley, por lo que «no depende de la voluntad política de ningún gobierno». Sobre la subida salarial que podría aplicarse a los empleados públicos, Sánchez ha señalado que ahora mismo empresarios y sindicatos están negociando un acuerdo de rentas, «donde no sólo se tiene que hablar de salarios, también de reparto de dividendos y beneficios por parte de las grandes empresas», y en función de ese acuerdo «se verá cuál es la evolución y negociación que se articula» respecto a los funcionarios. En este sentido, el presidente del Gobierno espera que los agentes sociales, de los que ha destacado su «extraordinaria responsabilidad para con su país» en los dos años de pandemia, puedan llegar a alcanzar el mencionado acuerdo de rentas.

Descarta bajada de impuestos generalizada

Sánchez ha descartado una bajada de impuestos generalizada como la que pide el PP porque eso, ha dicho, «no es creíble, no lo está haciendo nadie en Europa y no es un proyecto de país». «Si hay una lección que nos ha dejado esta pandemia es que el Estado del Bienestar es la piedra angular de la cohesión social y territorial de nuestro país (...) Todos aquellos que están diciendo que quieren bajar impuestos lo que están anunciando son recortes, como hicieron después de la crisis financiera», ha subrayado.

Sánchez ha defendido que el Gobierno español ha bajado ya impuestos, por ejemplo, a los sectores más afectados por los precios energéticos y los vinculados a la factura de la luz. «Estamos haciendo políticas que vinculan esas rebajas de impuestos a colectivos específicos (...) Esto es un clásico, el PP cuando está en la oposición dice que va a bajar impuestos, y luego cuando llega al Gobierno hace amnistías fiscales y sube hasta 50 impuestos a la clase media y trabajadora», ha afirmado Sánchez, que ha recordado al PP que «el impuesto más caro que pagan los ciudadanos es el de la corrupción».