Díaz coincidió con las representantes del partido de Errejón en la celebración de San Isidro. | Reuters

TW
3

La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha destacado que está «ilusionada» de cara a arrancar su proceso de escucha con la ayuda de la asociación 'Sumar', un concepto con el que se siente «cómoda» aunque ha especificado que no constituye el nombre definitivo de su futuro proyecto político. De hecho, ha pedido «cautela» porque el nombre de este colectivo, que servirá para organizar esta fase de consulta con la sociedad civil, no está formalmente confirmado en el Ministerio del Interior y se está a la espera de completar el trámite administrativo.

En declaraciones a la prensa antes de participar en el foro 'El trabajo del futuro y el futuro del trabajo', Díaz ha confirmado la solicitud para constituir esta nueva asociación con el objetivo de emprender dicho proceso de escucha, que lo «único que pretende» es «conformar un mundo de ideas para proyectar un país diferente». Este primer paso de cara a la nueva plataforma que impulsa arrancará después de las elecciones andaluzas del 19 de junio y, como ha explicado en anteriores ocasiones, durará alrededor de seis meses para después concluir cuál será su futuro. Eso sí, está confiada en que en este proceso de consulta pueda sumarse «mucha gente».

Por tanto, la vicepresidenta ha desgranado que se siente cómoda con el «verbo sumar», pues implica «ensanchar la democracia, los derechos fundamentales, el ecologismo y el feminismo», además de mostrar compromiso con las políticas de igualdad. La petición del registro de este colectivo, cuya finalidad es organizar los actos que reunirán a Díaz con la sociedad civil, se registró entre finales de marzo y principios de abril y se está a la espera de que Interior confirme la denominación escogida, algo que se estima para finales de junio o principios de julio, dado que el trámite dura unos tres meses.

La constitución ha corrido a cargo, según explican fuentes del entorno de la vicepresidenta, mediante personas cercanas a Díaz pero con un perfil anónimo, aunque entre ellos destacan algunas figuras como la profesora universitaria y edil de Compostela Aberta, Marta Lois, una figura que casa con la filosofía del proyecto dado que no forma parte de ningún partido político. También resaltan que la solicitud y nombre del colectivo era conocido por un número reducido de colaboradores de Díaz, pero los partidos del espacio confederal conocían los planes genéricos de Díaz de articular este proceso de escucha por medio de una asociación. Y es que este instrumento era el más adecuado desde el punto de vista jurídico para desplegar una fase de consulta de forma autónoma, dado que desde el principio se ha optado por organizar este proceso de forma independiente a los partidos.

De hecho, la vicepresidenta segunda ha remarcado en varias ocasiones que su intención es que la sociedad civil tenga el protagonismo en este proceso y también quiere que los partidos estén en esta plataforma, pero con un rol secundario. Además, ha comentado que su objetivo es construir una plataforma que concite grandes mayorías y no se limite a situarse a la «izquierda del PSOE», un espacio que tildó de «pequeño» y «marginal». La revelación del nombre del colectivo que le ayudará en esta fase de consulta coincide con varios gestos de cercanía a dirigentes ajenos a su actual espacio político.

Por ejemplo, arropó junto al líder de Más País, Íñigo Errejón, a la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, durante la presentación de su libro 'Política sin anestesia'. Durante las últimas fechas Díaz y Mónica García han coincidido en diversos actos, como en la manifestación por el Día Internacional de los Trabajadores el pasado 1 de mayo y, recientemente, durante las celebraciones de la festividad madrileña de San Isidro. En la pradera de San Isidro también se saludó con Errejón, con quien ya compartió un acto de presentación del comité de expertos para analizar el impacto de la precariedad laboral en la salud mental, donde el diputado destacó la «magnífica» relación con la titular de Trabajo y «sintonía política» en muchas materias.

Por su parte, Díaz y García participaron el pasado noviembre en un acto de líderes progresistas junto a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y la vicepresidenta valenciana y dirigente de Compromís, Mònica Oltra, un evento que no contó con representantes de Podemos. Una cita que despertó, por su simbolismo, debates sobre posibles alianzas entre fuerzas de izquierda, aunque todas las protagonistas restaron trascendencia al acto, consistente en exponer sus respectivas experiencias políticas. Mientras, Díaz no acudirá a la 'Fiesta de la Primavera' de Podemos que se celebra este fin de semana en Valencia, al igual que pasó con su ausencia en la 'Universidad de Otoño' que organizó el partido el año pasado. Y es que en círculos del espacio confederal perciben un distanciamiento entre Díaz y la formación morada.

La conformación de la coalición 'Por Andalucía', tras una negociación 'in extremis', ha provocado tensiones entre Unidas Podemos, según admiten diversas fuentes, y ha erosionado relaciones entre las dos fuerzas principales del espacio: Podemos e IU y entre distintos agentes del espacio confederal En la negociación de la confluencia se implicó el equipo de la vicepresidenta segunda, que medió entre las distintas partes para lograr una candidatura de unidad en la izquierda. De hecho, será la primera vez que Podemos y Más País concurran juntos después de la escisión que tuvo lugar en 2019.

Y es que varias fuentes del espacio reconocen que hubo una clave nacional en esas negociaciones, de cara a marcar posiciones en la futura conformación del frente amplio a nivel estatal. También del embrollo en Andalucía se pronunció recientemente el exvicepresidente Pablo Iglesias, al manifestar que el nuevo proyecto de Díaz empezaba de «la peor manera posible» tras el choque entre IU y Podemos, reclamando para el futuro por unas primarias para que «la gente» decida el candidato entre las diferentes propuestas. «Yolanda Díaz intervino y dijo que la candidata tenía que ser la de IU. Podemos se cuadra porque lo dice la jefa, aunque no estemos de acuerdo, y lo tenemos que asumir», dijo en declaraciones a la Cadena SER.

El apunte

Més en la suma

Si de sumar se trata, la pasada semana se tomó en València una foto destacada. En ella representantes de Més per Mallorca suscribieron el Acuerdo del Túria, una unión de cinco partidos de izquierdas capitaneado por Compromís y Más País, con la Chunta Aragonesista y Verdes Equo. Se trata de un paso más de cara a establecer sinergias que confluyan en una candidatura única en las próximas elecciones generales. El peso específico que puede aportar Mònica Oltra a este proyecto es similar al de Ada Colau en Barcelona, quien parece dispuesta a optar a la reelección en las próximas municipales. Sería su tercer mandato y la perpetuación del cambio, que según Díaz empezó hace unos años en Galicia.