El ministro español, atendiendo a los medios. | Reuters

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El ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, aseguró este viernes tras reunirse con la Comisión Europea en Bruselas que la decisión «unilateral» de Argelia de congelar las relaciones comerciales con España «viola el acuerdo de asociación» de ese país con la Unión Europea (UE). «La medida unilateral viola el acuerdo de asociación entre la UE y ese país y, por lo tanto, aunque va dirigida a España, afecta al mercado único, las relaciones económicas y comerciales de Argelia» con la Unión Europea, declaró Albares tras reunirse en Bruselas con el vicepresidente de la Comisión Europea responsable de política comercial comunitaria, Valdis Dombrovskis.

Previamente, Dombrovskis y el alto representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, dijeron en un comunicado que la Comisión sigue la crisis con «suma preocupación» y analiza las instrucciones de Argel a «las instituciones financieras para detener las transacciones entre los dos países, que a primera vista parecen violar el Acuerdo de Asociación UE-Argelia». Albares recordó que las competencias comerciales en la UE recaen sobre la Comisión Europea y aseguró haber «constatado el rechazo de la Unión Europea, de la Comisión y de las instituciones europeas a esta medida unilateral de Argelia».

El Gobierno de España y la Comisión Europea quieren, agregó el titular español, que «lo antes posible se vuelva al diálogo, a la amistad que tiene el pueblo de España con el pueblo argelino» y a restablecer «unas relaciones económicas normales entre España y Argelia, entre la Unión Europea y Argelia». España quiere «exactamente las mismas relaciones con Argelia que con todos sus vecinos», desde el «respeto mutuo» y la «no injerencia», añadió Albares, que definió los dos países como «pueblos amigos pero también (...) pueblos libres y soberanos». «La UE y sus instituciones lo ven exactamente igual que nosotros», aseguró Albares, quien agregó que Madrid y Bruselas coinciden también en defender los intereses de España y sus empresas en el país africano.

«Estamos también de acuerdo en que haremos una firme defensa de nuestras empresas y de los intereses de España, que son también las empresas europeas y los intereses de la Unión Europea», agregó el ministro, quien añadió que «el deseo de España es que esto se resuelva lo antes posible por el diálogo».