Imagen de archivo de una de las primeras campañas electorales de Podemos. | Efe

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El juez Manuel García Castellón ha abierto una nueva causa para investigar a Podemos por blanqueo en relación a los fondos que presuntamente recibieron algunos de sus fundadores de Venezuela, después de que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ordenara archivar el caso sobre la presunta financiación irregular de dicha formación que abrió el magistrado a raíz de las confesiones del exgeneral chavista Hugo Armando Carvajal. Según informa este martes un digital nacional y han confirmado a Efe fuentes jurídicas, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional ha hecho así uso de la posibilidad que le planteó la Sala de deducir «el testimonio oportuno» de la causa archivada «para la investigación de delitos económicos y falsedades».

Para dar carpetazo a la causa sobre la financiación de Podemos, atendiendo a la petición de la Fiscalía, los magistrados tuvieron en cuenta, entre otros motivos, que el delito de financiación ilegal de partidos no se introdujo en el Código Penal hasta 2015, fecha posterior a los hechos que dieron pie a la apertura de ese caso. Por ello señaló que los hechos, antes de que el Código Penal contemplase el delito de financiación ilegal de partidos políticos, «podrían tipificarse como delito de falsedad documental, blanqueo o contra la hacienda pública» y por tanto debían «ser investigados en procedimiento distinto» de la causa para la que se decretaba el archivo y cuyo objeto era «la posible financiación ilícita de Podemos».

De este modo, y según recoge el mencionado medio digital, el juez investiga ahora el itinerario de los presuntos fondos transferidos a través de testaferros desde Venezuela a las arcas de Podemos. Entre las revelaciones que hizo el exjefe de la Inteligencia venezolana, conocido como «El Pollo Carvajal», destaca en esta nueva investigación la relativa a la supuesta ayuda que recibió el exfundador de Podemos Juan Carlos Monedero, de altos cargos del Gobierno chavista para lograr que ese dinero llegase a España a través de un testaferro.

Para ello, ese testaferro, según el relato del Pollo Carvajal, se encargaba de trasladar ese dinero a un banco de una isla de Países Bajos fronteriza con Venezuela, y ahí crear cuentas fantasma desde las que transferir dichos fondos a un banco europeo para inmediatamente después eliminar dicha cuenta fantasma. Al parecer, García Castellón, fruto de la anterior investigación ahora archivada, habría conseguido averiguar que el citado banco caribeño se encontraba en la isla de Curazao, desde donde se tranfería presuntamente el dinero a un banco en Suiza y de ahí a España.