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Los derechos del colectivo de trabajadoras del hogar se han ampliado esta semana gracias a la aprobación de un Real Decreto que permite que puedan finalmente cotizar por la prestación de desempleo.

Pero las cosas de palacio pueden ir despacio. Es lo que ha alertado el sindicato CSIF, el principal sindicato de los empleados públicos, en una información recogida por el portal Noticias Trabajo.

En concreto, el problema radica en la falta de personal del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE): "La plantilla está muy preocupada y tensionada porque no dan abasto. La aprobación de esta nueva prestación va a empeorar la situación", dicen el CSIF.

Este sindicato cifra en 5.000 los trabajadores que son necesarios para el adecuado funcionamiento del SEPE, adscrito al Ministerio de Trabajo y Economía Social y que gestiona las políticas de empleo y las prestaciones por desempleo.

"En los últimos 10 años existen 3.674 efectivos menos. Además, los 1.500 interinos que estaban contratados para gestionar los ERTE con la pandemia, ya no están trabajando en la administración pública de empleo", dice el CSIF.

Según este sindicato, esta situación propiciará que se produzcan retrasos de hasta mes y medio para que las trabajadoras domésticas cobren la prestación aprobada por el Gobierno.