El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto | AYUNTAMIENTO DE BILBAO

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Juan Mari Aburto ha sido reelegido alcalde de Bilbao y asume su tercer mandato, en el que nuevamente gobernará con el PSE-EE como socio, tras el acuerdo de gobernabilidad alcanzado entre ambas formaciones, por el que los socialistas asumen cinco áreas en el Consistorio, una más que en la pasada legislatura, la de Educación, y los jeltzales un total de 11.

El salón de plenos del Ayuntamiento de Bilbao ha acogido este sábado la sesión de constitución del Consistorio en el que el PNV mantiene su hegemonía desde hace décadas.

Tras el acuerdo de gobernabilidad alcanzado entre el PNV y el PSE-EE, por el que se facilita la conformación de gobiernos de coalición en el conjunto de las diputaciones y de los ayuntamientos, Aburto ha resultado elegido alcalde en primera votación con los votos del PNV, que consiguió 12 escaños en las elecciones municipales y el apoyo de los cinco ediles del PSE-EE.

Por su parte, los seis ediles de EH Bildu, que se convirtieron en segunda fuerza el pasado 28 de mayo tras lograr dos representantes más que en 2019, han votado en blanco, mientras que los cuatro ediles del PP, uno más que hace cuatro años, han apoyado a su candidata a la alcaldía, Esther Martínez y los dos ediles de Elkarrekin Bilbao, fuerza que perdió un representante, han votado a su aspirante a la alcaldía, Ana Viñals.

El PNV, que obtuvo dos concejales menos que hace cuatros años, y se quedó a tres de la mayoría absoluta (15), gobernará nuevamente con el PSE-EE como socio, fórmula por la que ha optado Aburto en todos sus mandatos.

El pleno constitutivo de Ayuntamiento, al que han asistido alrededor de 200 personas, entre ellas, la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, el exconsejero de Interior, Juan Mari Atuxa o el exdiputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, se ha iniciado a las 11.00 horas.

Una vez reelegido y tras recibir la makila, Aburto ha asegurado que tiene «una hoja de ruta bien definida» para poder seguir mejorando Bilbao y la calidad de vida de los ciudadanos« y lo hará »pensando en todos« y »trabajando sin descanso" por la ciudad.

El alcalde ha manifestado que quiere un Bilbao «más internacional, abierto al mundo, desarrollado y atractivo para empresas y universidades», que «fomenten el empleo de calidad». También desea un Bilbao «joven, euskaldun y también políglota, seguro, limpio, atractivo y cohesionado».

En su discurso, no ha querido pasar por alto el resultado de las elecciones y «toma nota». «Con humildad y autocritica continua nos ponemos ante el espejo de una ciudadanía, orgullosa de su ciudad pero que quiere ser más escuchada y atendida, que busca más soluciones a sus problemas», ha manifestado.

En este sentido, ha asegurado que se deben esforzarse para seguir manteniendo «su confianza y apoyo». También ha indicado que lo «más preocupante» ha sido la alta abstención y se ha referido al hecho de que Vox fuera el partido que más creció en votos en Bilbao. «La abstención también abre la puerta a quienes no tienen sentido democrático ni aportan soluciones», ha añadido.

ESTABILIDAD POLÍTICA

Juan Mari Aburto ha asegurado que cuentan con un «renovado» equipo de gobierno para dar «estabilidad política, compromiso de buena gestión y dedicación» para Bilbao«, a la que se ha referido como »la mejor ciudad del mundo".

Según ha subrayado, ha conformado un Gobierno donde han readaptado las áreas municipales, con 11 concejalías el PNV (una menos) y 5 el PSE-EE (una más). También se ha dirigido a los portavoces de EH Bildu, PP y Elkarrekin Podemos a los que ha pedido «colaboración y no solo oposición».

Aburto cree que la ciudadanía, una vez más, les ha pedido «llegar a acuerdos». Por ello, ha pedido esa voluntad de diálogo y colaboración por ambas partes y que sea «fructífera en acuerdos, dinámica en planteamientos y generosa en decisiones».

Por ello, ha querido realizar una propuesta a la oposición para lograr acuerdos con los que afrontar los «retos de presente y futuro». En este sentido, ha expresado su deseo de que se pueda avanzar en los temas de movilidad recogidos en el PMUS o en la actualización -con nuevas medidas- del Pacto por la Seguridad de Bilbao porque la seguridad pública y la convivencia pacífica son «fundamentales».

También espera que todos los grupos se sumen al Pacto por la Paz y la Convivencia con el que se busca «la justicia, la verdad y la reparación de las víctimas», que se hable de lo barrios «con una visión realista», que se encabece la lucha contra todo tipo de violencia y que las personas estén en el «centro de todas las iniciativas».

PRIORIDADES

Por último, Aburto ha definido las tres prioridades que se ha marcado y que son las personas, barrios y el desarrollo económico y el empleo.

«Aquí tenéis a vuestro alcalde, dispuesto a darlo todo por vosotros, sin dejar a nadie atrás. Con rigor, firmeza, decisión y esfuerzo», ha concluido.

Previamente, habían tomado la palabra los portavoces de los grupos para explicar su voto y, el representante del PNV Asier Abaunza ha destacado que los ciudadanos han revalidado su confianza en el proyecto de Bilbao que se viene desarrollando y ha destacado que han demostrado que, junto al PSE-EE, pueden hacer frente a todo tipo de dificultades y tienen disposición a escuchar y acordar.

Ha añadido que tienen la «mano siempre tendida al acuerdo» para avanzar en una ciudad «más sostenible, más atractiva, inclusiva, accesible, equilibrada, generadora de oportunidades de trabajo, con buena calidad de vida y buenos servicios públicos», además de «mas feminista y euskaldun». «Y no hay nadie mejor que Aburto para liderar un equipo conformado por dos partidos, un gobierno »fuerte y eficaz, abierto siempre al diálogo", ha apuntado.

La portavoz del PSE-EE, Nora Abete, ha afirmado que han decidido reeditar el pacto con PNV porque creen «que es la herramienta necesaria para seguir impulsando las prioridades de la ciudad». Ha añadido que asumen este ejercicio de responsabilidad con la firme convicción de «volver a ser la garantía de los derechos sociales y la lucha por la erradicación de las desigualdades».

Abete ha subrayado que son dos partidos diferentes, pero son capaces de «unirse para trabajar» y que las personas «vivan más y mejor en esta ciudad». «Uniendo nuestras fuerzas, vamos a alcanzar el objetivo común de un Bilbao mejor, garante de estabilidad tanto en la gestión pública como en derechos sociales», ha añadido la representante socialista que se ha mostrado convencida de que este pacto será «un éxito en el futuro» porque «está basado en la confianza, el respeto y la lealtad».

La portavoz de EH Bildu, María del Río, ha afirmado que trabajarán para lograr «una ciudad acogedora», referente de las luchas sociales y vanguardia en la defensa de todos los derechos«. Según ha manifestado, se necesita »construir entre todos« un Bilbao que »cuide, con unos servicios públicos fuertes, y que apueste por la innovación social«. »Un Bilbao que sitúe a todos y cada uno de sus barrios en el centro, un Bilbao cohesionado", ha añadido.

Por su parte, la portavoz del PP, Esther Martínez, ha asegurado que trabajarán por todos los vecinos de la villa «sin exclusiones». Ha defendido la necesidad de moderación y sensatez para que Bilbao «vuelva a ser una ciudad abierta, solidaria, próspera, una ciudad de oportunidades» en la que prime la estabilidad política, económica y social.

La portavoz de Elkarrekin Bilbao, Ana Viñals, ha señalado que no apoya el nombramiento de Aburto, pero se está inaugurando un mandato que debe ser de «diálogo profundo y de encuentro sincero». Ha añadido que seguirán hablando «de lo importante» cono el precio de los alquileres o la situación de las personas en riesgo de pobreza o exclusión social.