Algunos datos a destacar son:
En moda y belleza se centran en la sostenibilidad y la individualidad. La Generación Z opta por comprar menos ropa nueva, repetir atuendos y buscar opciones locales. La búsqueda de una fragancia distintiva se convierte en una forma de expresión personal.
En las redes sociales, valoran las conexiones significativas. Instagram es una herramienta clave para mantenerse en contacto con amigos y familiares, así como para seguir tendencias actuales. Las interacciones digitales, como dar ‘me gusta’ a historias, compartir memes y reels, serán formas populares de acercamiento y expresión.
En las relaciones personales reflejan un cambio hacia la consolidación de amistades y relaciones existentes, con un enfoque en la honestidad y comprensión mutua. El intercambio de perfiles de Instagram es más común que el de números de teléfono, reflejando la influencia de las redes sociales en las interacciones sociales.
En el crecimiento personal y la exploración de nuevas oportunidades, los jóvenes se enfocan en mantenerse saludables, explorar caminos profesionales y viajar, con un fuerte interés en el autoempleo como medio para lograr la riqueza.
Y en la alimentación siguen tendencias de bienestar y sostenibilidad, con un marcado interés por la alimentación saludable, una extensión de su compromiso con estilos de vida sostenibles y conscientes.
Estaremos pendientes a estas tendencias ya que los Zetas marcan ahora el rumbo del social media, como antes lo hacían los millennials.
