El ex presidente del Govern, Jaume Matas - Archivo

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El ex presidente del Govern, Jaume Matas, se encuentra ya en España, dispuesto a declarar mañana, a partir de las 9 horas, ante el juez que instruye el caso Palma Arena, José Castro, quien le interrogará sobre las decisiones adoptadas durante la construcción del velódromo y que derivaron en el presunto desvío de más de 50 millones de euros. Asimismo Matas deberá explicar su incremento patrimonial, supuestamente ilícito, durante su segunda etapa como mandatario balear y la presunta financiación irregular del PP, del que era presidente, a través de la agencia de publicidad Nimbus.
nueve delitos.

Su abogado, Rafael Perera, sostiene que no incurrió en ningún delitoEl veterano abogado mallorquín Rafael Perera aseguró ayer a Efe que el ex presidente de Balears actuó "en todo momento con corrección y sin haber incidido en ninguno de los delitos que se le imputan" en relación al caso Palma Arena.

Jaume Matas llegó el sábado a Madrid en un vuelo directo desde el aeropuerto JFK, en Nueva York, ciudad en la que reside. Ese mismo día mantuvo una larga reunión con sus abogados, Manuel Ollé y Rafael Perera, para preparar su defensa ante los nueve delitos que se le imputan -prevaricación, cohecho, malversación de caudales públicos, aprobación indebida, falsedad documental, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, un delito fiscal y otro electoral-, castigados con penas de hasta 30 años de prisión.

Junto a Matas también han sido citados a declarar mañana su mujer, Maite Areal, su cuñado y ex tesorero del PP balear, Fernando Areal, y el conseller de Obras Públicas en el primer Ejecutivo de Matas y presunto testaferro de éste, Bartomeu Reus, todos ellos como encausados dentro de este procedimiento que suma más de 40 imputados. Entre ellos ex altos cargos del PP, empresarios, constructores y proveedores que participaron en las obras de la que se consideró la infraestructura estrella durante la legislatura 2003 a 2007.

Operación Buckingham
La investigación sobre el patrimonio de Matas fue iniciada por los fiscales anticorrupción de Balears, Juan Carrau y Pedro Horrach, tras detectar posibles irregularidades en la compra de la vivienda que posee en la calle Sant Felio de Palma, conocida como palacete, por la que el ex dirigente 'popular' pagó unos 980.000 euros pese a que el inmueble, de más de 700 metros cuadrados y de estilo manierista, estaba tasado en 2,4 millones. Según el Ministerio Público, el ex  ministro pudo incurrir por este hecho en un delito de cohecho  impropio y la rebaja en el precio habría supuesto "una dádiva o  regalo en especie".

Agencia Nimbus
Matas será previsiblemente interrogado en la pieza que investiga la presunta financiación irregular del PP y el supuesto desvío de fondos para mejorar la imagen del ex jefe del Ejecutivo, todo ello a través de la agencia de publicidad Nimbus, que se encuentra bajo lupa judicial en el marco de este procedimiento.

En esta pieza han sido imputados y han prestado declaración Dulce Linares, ex jefa de gabinete de Matas; Jane King, ex número dos de la ex vicepresidenta, Rosa Estaràs; el ex director general de Comunicación  del Govern y actual jefe de prensa del PP, Joan Martorell; el periodista Antonio Alemany; y la ex directora general de la televisión autonómica IB3, Maria Umbert.

Tras cinco meses de espera, el ex mandatario autonómico y del PP balear podrá mañana dar su versión de los hechos sobre este asunto, en el que la Justicia investiga el aumento del coste en la construcción del velódromo Palma Arena en la pasada legislatura, el incremento de su patrimonio y la financiación del PP.

Perera y el también abogado defensor Manuel Ollé han pasado todo el fin de semana en Madrid con Matas preparando esta declaración judicial, con el "deseo" y "propósito" del ex presidente de "colaborar" con la Justicia y "aclarar los hechos".

Minutos antes de trasladarse ayer a Palma, Perera recordó que su defendido ha solicitado comparecer ante el juez desde hace un año, al tiempo que ha comentado que es "infrecuente" que la citación del juzgado se formalizara hace cinco meses. "Mantengo que el señor Matas, según su versión, ha actuado con arreglo a la legalidad", insistió el letrado, quien precisó que ni su defendido ni el juez tienen en cuenta las informaciones publicadas en los medios sobre este caso.
En opinión de Perera, el proceso judicial no es un "proceso mediático", entre otras razones porque se han publicado informaciones "incorrectas, no ajustadas a la verdad" o incluso "deformadas".