El Govern aprueba una línea de crédito de 30 millones para pagar a proveedores

El portavoz del Govern, Rafael Bosch, ha informado de esta línea de financiación a la que pueden acogerse unas 600 empresas a las que se adeudan facturas reconocidas, expedidas y pendientes de pago anteriores al 30 de diciembre de 2011. Se trata de créditos que tienen la finalidad de dar liquidez a las empresas para que puedan mantener su actividad y cuyos intereses serán subvencionados por el Govern.

La iniciativa se instrumentalizará a través del Isba por medio de un convenio firmado entre esta entidad y la comunidad autónoma. Estos créditos permitirán a las empresas obtener liquidez de manera inmediata "a precios por debajo de mercado" y sin garantías adicionales con el aval del Govern.

La línea se formalizará mediante operaciones de crédito (instrumentadas en una póliza de crédito, préstamo o cualquier otra modalidad financiera admitida por el Banco de España), con el aval de Isba, SGR, y el reaval de la Compañía Española de Refinanciación (Cersa) y de la comunidad autónoma. Las obligaciones reconocidas constituirán la base para la concesión del aval, sin que se puedan pedir garantías complementarias.

Cabe señalar que la puesta en marcha de esta iniciativa da cumplimiento al Decreto ley de apoyo a los emprendedores y a la micro, pequeña y mediana empresa que establece entre sus objetivos el de "facilitar el acceso de las pyme a la financiación".

De hecho, se concreta que el Govern debe "facilitar el acceso al crédito tradicional dotando los fondos de provisiones técnicas de las sociedades de garantía recíproca (SGR) para reforzar las líneas de avales para emprendedores y para micro, pequeñas y medianas empresas, en las diferentes fases".

Procedimiento para solicitar los créditos

Las pymes interesadas podrán solicitar financiación a través de Isba, SGR, de las entidades de crédito que han formalizado convenio con Isba y a la comunidad.

Las pymes tendrán que solicitar un certificado de documentos pendientes de cobro emitido por la Dirección General del Tesoro estableciendo un calendario de cobro con plazo máximo de tres años.

El Isba estudiará y analizará las operaciones, que se concederán en función de la viabilidad de las empresas según los criterios de esta entidad.

Asimismo, el Isba no solicitará garantías adicionales para garantizar la operación, puesto que la propia garantía serán las amortizaciones de pagos realizados por el Govern a los préstamos.

Los intereses y los costes del aval los abonarán directamente las empresas a las entidades de crédito, si bien los costes de estás pólizas serán inferiores a los precios habituales de mercado.

Se trata de un recurso que el Govern podría utilizar "como instrumento recurrente" y que le permite la posibilidad de obtener mayor capacidad de financiación y liquidez inmediata para hacer frente a sus deudas.

Bosch ha reconocido que en un año no se podrá hacer frente al pago de la totalidad de las facturas que mantiene pendientes con sus proveedores, que rondan los 1.000 millones de euros, por lo que ha precisado que habrá que negociar con las empresas para establecer calendarios de pago.