Bauzá con el presidente de Madrid, Ignacio González en la sede nacional del partido - Efe

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Balears no tiene prisa por cambiar el modelo de financiación y esperará a que el Gobierno de Mariano Rajoy tome la iniciativa y platee el debate sobre la mesa. El president del Govern, José Ramón Bauzá lo dejó claro a la salida de una reunión mantenida por la dirección del PP en la calle Génova horas antes de tomar un vuelo en dirección a Uruguay. «Vamos a seguir trabajando para que el tema se analice en 2014», dijo el president.

Con estas declaraciones, Bauzá se aleja de planteamientos más reivindicativos que mantuvieron otros presidentes autonómicos, como el madrileño Ignacio González. Reclamó un cambio de modelo que ponga limitaciones a la solidaridad y exigió que el debate se cierre antes de que acabe este año. Fuentes del PP balear explicaron que Bauzá estuvo de acuerdo en lo primero, en las limitaciones a la solidaridad, pero no en que el modelo se aborde ya.


Aliado de Rajoy

Bauzá se posicionó de esta manera del lado de Rajoy, es decir del lado del aparato que controla el PP, frente a posturas menos tibias de otros barones y baronesas, como la catalana Alicia Sánchez-Camacho y el valenciano Alberto Fabra, que piden cambios cuanto antes. Rajoy ya ha dicho que el debate sobre financiación no se pondrá sobre la mesa hasta marzo, una vez aprobada la reforma fiscal en la que trabaja el Ministerio de Hacienda.

Rajoy también aseguró ante los dirigentes del PP que no cambiará «cromos» con Catalunya, algo que Bauzá calificó de «obviedad». «Las normas están para cumplirlas y no puede ser una excepción que alguien no cumpla la ley», opinó.

A la salida del encuentro mantenido en Génova, Bauzá también lamentó que el actual modelo se deba a un pacto suscrito entre una única comunidad autónoma, Catalunya, y el Gobierno central presidido entonces por Zapatero. Por contra alabó que el modelo pactado en la época de José María Aznar se aprobara por unanimidad. Ese modelo dejaba a Balears muy por debajo de la media en financiación.

El Govern balear aún no tiene cerrada del todo la propuesta que defenderá cuando el debate sobre financiación se ponga sobre la mesa pero, en cualquier caso, aspira a mejorar la situación actual.