El expresident Jaume Matas atiende a los reporteros de 'El programa de Ana Rosa' a su salida de la prisión de Segovia. | Telecinco

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Jaume Matas ha realizado sus primeras declaraciones tras su ingreso en prisión a finales del mes de julio. El expresident del Govern de les Illes Balears atendió a los reporteros de 'El programa de ana Rosa' de Telecinco a su salida de la cárcel de Segovia, donde continua cumpliendo su condena en régimen de tercer grado.

«He cometido una falta y me han castigado por ella», dijo Matas para explicar su actual situación, recordando que en estos momentos es la única condena que pesa sobre su persona e insistiendo en que en estos momentos no hay ningún otro juicio abierto contra el. «Investigaciones hay las que quieran desde hace seis años pero condena tengo ésta y nada más», añadió, insistiendo en que mientras no se «agota la vía judicial» se debe mantener la presunción de inocencia.

El expresident del Govern, que se mostró afable con los reporteros e incluso les ofreció su paraguas par que se resguardase de la lluvia, relató los problemas auditivos que ha sufrido en los últimos meses y negó haber recibido ningún trato de favor en la penitenciaria segoviana.

Sobre su imputación en el caso Nóos, Matas reconoció que lo acusarán «de cosas bastante más graves que tráfico de influencias», el delito por el cual está cumpliendo una pena de 9 meses de cárcel en la actualidad.

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El exministro relató que conoció el proyecto de Iñaqui Urdangarín a través de Pepote Ballester, quien ocupaba el cargo de director general de Deportes en aquellos momentos.

«El Duque de Palma tenía un íntimo amigo que era el director general de Deportes. Un día me dice 'oye, el Duque quiere presentarte un proyecto'», ha explicado Matas, quien mostró interés en las ideas de Urdangarín porque «tocaban nuestro punto débil, la estacionalidad».

Según el expresidente todo se organizó desde el Instituto Nóos. «Nadie puede pensar que yo me he llevado un duro o que el Duque me haya pagado algo», dijo.

Matas considera que continua imputado en el caso Nóos porque es el único político «que queda». «Si no consiguen meterme a mí diciendo que ha habido malversación solo podrán coger a Urdangarín por un delito fiscal y nada más».