El médico del Hospital Son Espases es uno de los autores del estudio «Lepra en Baleares: Revisión de casos en los últimos 20 años», que revela que el Servicio de Anatomía patológica de los hospitales Son Espases y Son Llatzer ha registrado 9 pacientes con lepra o Enfermedad de Hansen (EH), 7 de ellos hombres y 2 mujeres.
Seis de los pacientes fueron diagnosticados de lepra multibacilar y 3 paucibacilar. En relación al lugar de diagnóstico: 8 proceden de Mallorca y uno de Ibiza; Menorca no ha tenido casos de EH durante los 20 últimos años. En seis de los pacientes, la edad media cuando se diagnosticó ha sido de 46,8 años.
Ramos ha explicado a Efe que «la mayoría de los casos detectados son importados, no son autóctonos» ya que, si bien la lepra no es habitual en España, sí es prevalente en India, Brasil y varios países de África.
Ocho de los nueve casos estudiados (el 88,8 %), proceden de áreas donde la lepra es endémica, «sobre todo de Latinoamérica».
El especialista ha recalcado que no hay ninguna alarma social sobre esta patología porque «dentro de que es una enfermedad muy prevalente en estos países, es poco contagiosa, ya que para cualquiera que entre en contacto con la lepra hay un 90 % de posibilidades de que no tenga la enfermedad».
Aun así, Ramos intervino la semana pasada en la XIII reunión anual de la de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) que se celebró en el Colegio de Médicos de Baleares, en Palma, para alertar a los dermatólogos sobre «un tipo de lesiones blancas, hipopigmentadas y anestésicas, con pérdida de sensibilidad» porque si los pacientes vienen de otros países con incidencia de lepra alta puede tratarse de esta enfermedad.
«Si vemos a algún paciente con lepra hay que estudiar a los familiares porque el contagio es muy íntimo», ha agregado.
El doctor Ramos considera que es una enfermedad «que habría que estudiar más ya que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la clasifica entre las enfermedades tropicales desatendidas».
«Hay que tenerla en cuenta e investigarla porque no es cultivable, como otras enfermedades y precisamente por eso tenemos problemas para investigarla ya que debe hacerse en pacientes», detalla.
Los síntomas de la lepra son muy variables porque es el sistema inmune de cada paciente el que los dicta. «Lo más típico son lesiones más blancas del tono de la piel normal, y que son anestésicas, de modo que en esa zona de la piel no sentimos ni el calor ni el tacto», explica el especialista de Son Espases.
El tratamiento lo da de forma gratuita al OMS y lo constituyen tres antibióticos.
Es una enfermedad infecciosa crónica causada por Mycobacterium leprae que puede presentar manifestaciones a largo plazo después de la curación. Se caracteriza por un largo período de incubación con manifestaciones cutáneas y neurológicas. Hay de dos tipos, para una de ellas el tratamiento dura unos 6 meses y para la otra puede llegar a ser de unos 2 años.
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