El invierno avanza y no todas las aulas hacen un uso correcto de estos medidores, a pesar de la buena voluntad de autoridades, equipos directivos y profesionales docentes.

TW
2

En pleno enero y con el frío del invierno preocupa la situación de los niños en las escuelas de Balears. Hasta el momento los centros educativos han contenido bien la progresión del coronavirus en las Islas, los datos lo demuestran, aunque la tendencia empieza a revertirse. Las temperaturas heladas traen consigo la tentación de no ventilar las aulas suficientemente, algo que preocupa a los expertos de Salut y Educació. Un arma muy útil, en este contexto, son los medidores de dióxido de carbono, que los centros baleares han instalado en las últimas fechas. Ellos marcan los niveles de CO2 y determinan cuándo esa acumulación es peligrosa para la salud. Sin embargo, algunas voces dentro de la comunidad educativa muestran reticencias.

Para muestra un botón. La imagen que acompaña esta información ha sido tomada recientemente en un centro público de Mallorca. En ella aparecen tres medidores de CO2 depositados sobre una mesa, a escasa distancia unos de otros en una aula con todas las ventanas abiertas. Sorprende comprobar que la medición de ninguno de los tres dispositivos es la misma; de hecho es bastante dispar. Entre tanto los docentes desconfían de una herramienta sobre la cual no tienen ningún conocimiento técnico específico.

Noticias relacionadas

«Nos hemos leído las instrucciones y hemos seguido haciendo pruebas. Hemos consultado la página web y hemos descubierto cómo calibrarlos desde el exterior, antes de llevarlos a las clases. No somos los únicos, cada escuela tiene este problema», comenta a Ultima Hora un miembro del claustro.

Una de las causas de la confusión viene determinada por la forma de proceder. Al parecer la conselleria d'Educació adelantó el dinero a los centros para comprar los medidores, pero no todos ellos se han hecho con los mismos modelos o marcas, de modo que compartir experiencias sobre su utilización sirve tan solo relativamente. La consecuencia es clara: enero avanza y no todas las aulas hacen un uso correcto de estos medidores, a pesar de la buena voluntad de autoridades, equipos directivos y profesionales docentes.

¿Qué dicen los expertos en esta cuestión? Juan Ribas Cantero, decano del colegio oficial de ingenieros técnicos de Balears (COPETI-Balears), cree complicado explicar la «aparente dispersión de medidas indicadas por los dispositivos solo con la fotografía». No obstante, recalca la importancia de la ventilación como medida preventiva contra la COVID y recomienda «encarecidamente el asesoramiento de profesionales expertos que estudien y analicen las condiciones particulares de los recintos» donde se aplique esta tecnología.