Casas. El técnico de Manresa se mostró tranquilo y seguro de las posibilidades de su equipo

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María Álvarez Maó
Sin apenas tiempo para disfrutar los dulces sabores de la Navidad, el ViveMenorca regresó ayer al trabajo después de un día y medio de descanso dedicado, sobre todo, y como todos, a disfrutar de la compañía familiar. El técnico Ricard Casas aterrizó el jueves en la isla y ayer se puso manos a la obra para dirigir el entrenamiento del equipo, con la voluntad de "conectar rápido con el trabajo" después del parón navideño.

"Este descanso viene bien. El equipo ha podido pasar el día que toca pasar y lo importante es haber descansado y que los jugadores rápidamente se vuelvan a centrar en los entrenamientos", aseguró el técnico.

Con la vista puesta en el desplazamiento de mañana a Sevilla para disputar otro vital encuentro ante un Cajasol herido, Ricard Casas valoró ayer el buen trabajo del equipo que vive una "situación regular aunque esta semana haya sido algo diferente. Llegamos al partido con una preparación normal".

Ganar en Sevilla mañana supondría igualar el inicio de temporada de la pasada campaña, en la que en la decimoquinta jornada el conjunto de Casas sumó su sexta victoria ante el Barça en Bintaufa. Ahora, la sexta se la juegan a domicilio. Por eso, la mentalidad del grupo es lo más importante y, según Casas, el equipo no irá a San Pablo ni mucho menos relajado: "Somos conscientes de la importancia que tiene el partido. Conscientes de la dificultad ya que el Cajasol tiene unas necesidades muy grandes de ganar".

Sin buscar más explicaciones que la dificultad intrínseca de la Liga ACB, el equipo sevillano vive una difícil situación y buscará darlo todo ante el ViveMenorca para resarcirse de las derrotas pasadas y encontrar en la victoria un punto de inflexión en esta catastrófica temporada para los de Martínez, algo de lo que es bien consciente el técnico Ricard Casas cuando fue preguntado en rueda de prensa. ¿Partido trampa? No, en lo que respecta al técnico del Menorca. "No creo que sea un partido 'trampa', sabemos que el Cajasol tiene una buena plantilla y somos conscientes del nivel al que pueden competir, no hay lugar a sorpresas por nuestra parte. Sabemos cómo tenemos que afrontar este partido".

Casas ofreció su punto de vista sobre el nuevo entrenador del rival de mañana y sobre las posibles bazas que jugarán en contra del ViveMenorca en la pista de San Pablo. "Cada entrenador intenta aportar al equipo sus lecturas e ideas. Es un grupo que quiere generar agresividad, juego abierto y está claro que hay una alta calidad en los jugadores que les hace tener polivalencia en el juego. Por eso debemos estar preparados para mantener un ritmo alto y hacer un buen trabajo en el rebote.

Una victoria ante el Cajasol mañana supondría para el equipo menorquín "un paso más, como cada triunfo, y ese es el objetivo. Quedan tres partidos para finalizar la primera vuelta y de momento el equipo está cumpliendo con los objetivos. Estamos contentos con la manera de competir hasta ahora", concluyó el técnico.

Bud Eley y Otegui, dudas
El cuadro menorquín se ejercitó ayer en Bintaufa con normalidad, exceptuando a Bud Eley y Urko Otegui, este último siendo duda para el choque de mañana.

Ricard Casas explicó sobre la lesión de Eley que "seguimos distribuyendo bien el trabajo que debe seguir. Va entrenando con la pauta de la semana pasada porque no podemos forzar más de la cuenta".

Sobre si el pívot americano formará parte o no del cinco inicial, Casas fue concluyente: "Aún no se puede hacer una lectura exacta de cómo podemos preparar la entrada del partido del domingo, pero sí seguiremos la línea de la pasada jornada, esperando que Bud pueda ayudar lo máximo posible".

Mientras, Urko Otegui no ha podido participar en los entrenamientos y será duda para el partido ante Cajasol hasta el último momento. El jugador se resiente de un golpe."Tuvo un problema en un dedo del pie. Tenemos que esperar a ver si se rebaja el dolor y la inflamación y nos puede ayudar en este partido, aunque hasta ahora no ha podido hacerlo", afirmó Ricard Casas, que espera tener a todos sus efectivos disponibles para afrontar este partido de vital importancia y regresar a Menorca con una victoria de los tres partidos que restan de la primera vuelta.