Nada de nada. El Menorcarentals no encontró la manera ayer - Gemma Andreu

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Los números que barajaba el Menorcarentals no se cumplieron. El partido ante Godella era importantísimo para asegurar prácticamente la salvación, para hundir a los valencianos y para encarar los dos siguientes partidos (Palma y Alcázar) con más confianza. Pero en un encuentro irregular y con muchos errores, los de Alaior cayeron 60-69. El Godella llevaba 12 derrotas seguidas. Su última victoria se remontaba a noviembre del año pasado... Ante el Menorcarentals.

El partido se inició como no gusta ver. El Alaior empezó frío, sin intensidad, fallón. No es que el Godella jugara mejor, ni mucho menos. Pero tuvo el mínimo acierto para ir por delante durante todo el primer cuarto. Los valencianos, que jugaron con la camiseta azul del Jovent, disfrutaron de dos ventajas máximas de seis puntos (2-8 y 6-12) ante la falta de fluidez atacante local. El periodo acabó 13-17 y más de un bostezo se escapó en la grada del Poli de Alaior.

Los siguientes diez minutos fueron los del "sorpasso" en el marcador para el Menorcarentals, que haciendo un poco mejor las cosas que en el primer periodo, se pusieron por delante. El Godella demostró el porqué de su clasificación y el porqué de tener todos los números para acabar descendiendo. Los errores en el pase, las contras perdidas y los tiros sin tocar aro fueron múltiples.

A poco de iniciarse el cuarto dos acciones de Valdivieso y Petkovic igualaron el luminoso a 17. Moya movió el banquillo y sacó a Cicerón por Faner. Dos tiros libres de Cicerón y un triple de Ceada dieron la primera ventaja local a 5:23 del final del cuarto (22-21), una ventaja que los alaiorenses ya no dejaron escapar y que aumentó hasta los cinco puntos en el 28-23 a 1:34. Se llegó al descanso con los valencianos dándose ánimos en el túnel de vestuarios y un 19-11 (32-28) que mostraba lo que había sido el partido hasta el momento: de baja calidad, tal y como indicaban también las valoraciones globales de ambos equipos (22 Menorcarentals, 26 Godella).

El Godella, que en la primera parte jugó con camiseta local, ahora salía también con pantalón alaiorense. Un triple por bando eran la promesa de que el juego mejorara y se ajustó el marcador (35-36). Aumentó la intensidad en el juego, pero no la calidad. Patkovic, por ejemplo, no tuvo ayer su día. El partido entró en un toma y daca, con igualdad en todo (38-38 a 5:47). En varias fases se adelantó el Godella y solo Faner tiraba del Alaior. El cuarto acabó en un negativo parcial en contra de 0-8 (42-50).

El peligro de perder empapó el último cuarto. Aumentó cuando Rubio metió un triple para el 42-53. Apretó el Alaior los dientes, pero iba a remolque y encima Valdivieso vio una técnica a 6:23 para el 47-55. El Godella se mantenía, a pesar de que el Menorcarentals ajustó a 3:11 con el 55-57. Incluso aumentó ventaja en un 0-6 (55-63 a 1:42). Los valencianos ni se lo creían. Pero ganaron. 60-69. Fatal.