FANER. El base fue clave pero su salida por culpa de una lentilla permitio al Valencia despegarse - Archivo

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Séptima derrota consecutiva para el Alaior Menorcarentals en la cancha de Valencia (82-77), tras un encuentro repleto de claroscuros del conjunto de Nando Moya.

A pesar de las ausencias de Igual y Valdivieso, lesionados, el Alaior jugó un gran primer cuarto, para verse superados después con claridad por un filial valenciano que llegó a irse de quince puntos. La reacción del cuadro alaiorense le llevó a dos puntos apenas a 40 segundos del final, pero falló el ataque decisivo y los puntos se quedaron en la cancha levantina. Los hados insisten en los desenlaces negativos para el cuadro de Menorca que aún no tiene asegurada la salvación.

En el primer tramo del encuentro sorprendió el equipo visitante a un Valencia desubicado en la pista, con malas transiciones y desequilibrios en el juego interior. Joan Faner lideraba al equipo con sus lanzamientos exteriores, pero pronto empezó a verse agobiado por las faltas personales.

Nwadike se fajaba en las pinturas con los pívots levantinos y el encuentro se movía en una dinámica de ventajas cortas para un Alaior que gustaba en El Vedat. Pero los problemas surgen en las situaciones más inesperadas, y hacen daño a un bloque con la moral muy tocada por culpa de las seis derrotas consecutivas.

Joan Faner tuvo un problema con una de sus lentes de contacto y se vio obligado a salir de la pista durante unos minutos, circunstancia que aprovecharon los locales para tomar la delantera ante un cuadro isleño que se había quedado sin su faro en la pista.

Los triples de Piquer y Navarro guiaban al Valencia BC, que le daba la vuelta a la situación en un segundo cuarto donde la defensa de Alaior se veía superada con mucha claridad. Además, la superioridad de los locales en el rebote, aplastante durante muchos momentos del encuentro, les permitía segundas y hasta terceras opciones de tiro. Al descanso, 45-41 para Valencia, si bien las opciones seguían intactas.

El Alaior se vio superado en la reanudación por un Valencia que salió a por todas. El trabajo en las pinturas de Navarro, con doce rebotes, y de Guillem Pla acababa de sepultar a un cuadro menorquín al que apenas le salía nada. Sólo los buenos porcentajes de Dioum en el ataque mantenían con mínimas opciones a un Alaior que llegó a verse quince abajo, pero que a partir de ese instante empezó a despertar.

El trabajo desde la línea de tiros libres, forzando bien muchas faltas a los inexpertos jugadores de Valencia, permitía remontar a base de coraje. Los nervios atenazaron en el cuarto periodo a los locales, con numerosas pérdidas. Faner, recuperada la visión, siguió anotando hasta que las faltas le llevaron al banquillo, y a 40 segundos del final el equipo sólo perdía por dos puntos. Incluso tuvo en sus manos el lanzamiento para el empate (79-77). No entró, y en la jugada siguiente el equipo de Valencia pudo amarrar el triunfo final.