A veces, el capricho del calendario obliga a los equipos a comenzar su andadura por las categorías en un auténtica etapa reina. Es el caso del Menorca Bàsquet al que le espera un retorno a la LEB Oro, rebautizada como Adecco Oro, algo complicado con el debut en el Pazo dos Deportes, en Lugo.
No cae simpático el equipo de Josep Maria Berrocal, que cuenta con un pasado un tanto polémico relacionado con el equipo de Lugo, que acaba de perder su mediático nombre de Leche Rio. El Menorca debuta en la cancha de uno de los, a priori, favoritos en la lucha por acabar en el play off. Condición que comparten y que hoy, en cierta medida, se pondrá en juego.
No será fácil. No ayudará el ambiente hostil, no ayudará el rival, ni tampoco lo hará el hecho de que el equipo se haya construido de cero en todos sus aspectos. Uno de los mensajes que han transmitido los jugadores y el técnico a lo largo de la pretemporada es que el grupo anda falto de tiempo para terminar de conocerse. Este punto es el que más preocupa a Berrocal, que ha aprovechado esta semana para terminar de pulir algunos aspectos que no le gustaron en la derrota ante el Fiatc Joventut, en el Memorial José Timoner (75-77).
Enfrente, el Menorca se topará con un equipo muy físico, con un juego interior que asusta. Los americanos Andy Ogide, que vivirá su primera experiencia como profesional, y Brook Sales llevan el peso anotador del equipo, bien secundados por el guerrero, ex de Burgos, Manu Gómez. Los lucenses se sienten dolidos por la 'fuga' de Arteaga al Menorca, después de que el pívot pagara su contrato para desvincularse.
El Menorca, por su parte, tiene la duda de Marc Blanch, que ayer completó con éxito el entrenamiento previo al desplazamiento a Lugo, y esta mañana Berrocal y el cuerpo técnico tomarán la decisión tras realizar la última sesión antes del choque. Los demás jugadores se encuentran en perfectas condiciones.
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