Un referente. Jordi Anglada, con semblante serio, ayer durante una sesión de entrenamiento en la pista de Santa Clara; la suya, una voz autorizada como pocas dentro del contexto insular. | Gemma Andreu

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Pulsamos a Jordi Anglada (Ciutadella, 1963). Y con motivo. En tanto que el baloncesto menorquín trata de restablecer un estatus 'de mínimos' con su atrevida apuesta de reimplantar la Primera Balear, el predominio de ese esfuerzo se advierte absoluto desde el flanco del Llevant insular (Alcázar, La Salle Mahón e Insotel Sant Lluís) con la puntual excepción del JM Ferreries. La merma reside en Ciutadella sin embargo.

Otrora plaza clásica del basket insular y autonómico, prolífica factoría con varias incursiones en el escenario nacional entre los 70 y 2000 por medio de las extinguidas Tercera y Segunda División estatales y la EBA actual, la ciudad del Ponent menorquín no ha sido capaz de articular un proyecto senior con el que enarbolar de nuevo la bandera del baloncesto y por elevación contribuir a ese pretendido renacimiento colectivo. De referencia absoluta a nula presencia. Pocas voces tan autorizadas como la de Anglada, técnico de amplio y reconocido prestigio en el contexto local y balear, para evaluar esa coyuntural realidad. El experimentado entrenador, que cumple una nueva etapa en el Boscos, cuya estructura de cantera dirige, expone su diagnosis, la que en suma trasciende a ser un distinguido tratado sobre el estado del baloncesto en Ciutadella y Menorca. Todo fragmentado en diez capítulos. Por un basket mejor. Palabra de Anglada.

1CANTERA. Anglada, a nivel de formación, ve «bastante bien el basket de Ciutadella. Boscos está en un momento álgido, con muchas inscripciones, tanto en niños como en niñas, y el Ciutadella hace su trabajo». El problema lo advierte el técnico en la «falta de continuidad». «Al terminar el ciclo junior no todos marchan a estudiar, pero los que se quedan no siguen jugando, falta compromiso. Nuestra idea era sacar un senior este año, para lo que teníamos seis seniors y un par de juniors de cierto nivel. Uno de los seniors se ha ido de la Isla y otro ha fichado por el Ferreries... es muy complicado, pues falta mucho compromiso en general, y no solo en Ciutadella», relata Anglada.

2EQUIPO SENIOR. El experimentado entrenador valora fundamental promover la puesta en liza de un conjunto senior. «Es la intención del Boscos, y cuanto antes mejor, esperemos que el año que viene sea posible, la cantera necesita un espejo, que haya cierto ambiente, pero tenemos que hacer algo; en el Ciutadella terminó hace poco una buena generación de juniors y ninguno sigue jugando... en la Isla apenas hay jugadores de entre 25 y 30 años y tengo claro que Boscos y Ciutadella deben buscar un bien común, una fusión o acuerdo de sus primeros equipos. Ahora mismo no hay suficientes recursos para repartir entre dos, y lo digo tanto en femenino como en masculino; debemos buscar el beneficio colectivo», se sincera Anglada.

3TORNEO LOCAL. Potenciar la competición insular es una de las propuestas de Anglada para burlar la actual crisis existencial, pues con una perspectiva 'medioplacista' considera que «la liga balear, nada». «Ahora mismo falla todo, no hay un equipo donde los chicos puedan verse jugando. En el caso del Boscos, jugar la liga autonómica tendría un aliciente pobre y por eso soy partidario de crear una liga menorquina fuerte, igualada. La Regional de fútbol es una referencia, una competición en la que cualquiera puede vencer a cualquiera, o nuestra Copa de basket, que ha disfrutado de un buen seguimiento». En ese sentido, abunda Anglada en la necesidad de rescatar «el aliciente de las rivalidades, entre La Salle y Alcázar, ambos con el Boscos...».

4PRIMERA BALEAR. La competición balear ha costado siempre de afianzarse. Su retorno tras un año sin disputa en su formato interislas no convence al técnico de Ciutadella. «Hemos pasado de tener mucho a no tener nada y quizá a la gente ahora le falte algo, por eso va al basket, pero la Primera Balear no es el futuro. Total, nadie quiere subir a EBA, por lo que sería mucho mejor potenciar una liga de Menorca igualada, recuperar ese 'caliu' de la grada. De algún modo hay que motivar a la afición y a la gente joven, pero manteniendo los pies en el suelo».

5GASTO SIN PERSPECTIVA. Este apartado vincula de modo directo con el epílogo del previo. Anglada se muestra crítico con la pasada etapa de exuberancia económica, que cataloga de «cáncer» para el baloncesto local. «Como se dice aquí, sacamos 'los pies del llançol'. Esos años en que se pagaba mucho dinero a jugadores de Primera Balear hicieron mucho daño. Sarris, Soriano, Ortiz, Muñoz... jugadores que parecía solo se movían por dinero... yo nunca me moveré por dinero sino por amor al basket», anota Anglada, igualmente contundente con la política de los clubes locales de un decenio atrás. «Cuando se aseguraron el dinero institucional para los viajes, eso que se ahorraban, se lo gastaron en fichajes desproporcionados, no hubo perspectiva ni visión de futuro», resalta y lamenta.

6PROYECTOS ACTUALES. Anglada rechaza de lleno 'quitar' dinero de la cantera para potenciar un primer equipo, «necesitamos gente comprometida con la camiseta y el basket», alude, y evalúa «correcto» el planteamiento de La Salle Mahón, a la vez que «estrambótico». «No sé... jugadores de 40 años... y encima ganan e igual son campeones; también veo pocos jóvenes en el Sant Lluís, algunos veteranos en el Ferreries... el Alcázar sí, es un ejemplo, pero aún sufre por la deuda generada de su aventura en EBA. En cualquier caso no creo que ahora gente como Tisi Reynés o Barber jueguen en La Salle por dinero precisamente. Lo que ya no sé es si gente como Soriano o Sarris volverían a jugar si les llamaran de Ciutadella», prosigue.

7lEGADO ACB. El técnico del Boscos considera que la eclosión ACB en Menorca «no hizo daño, pero no se supo aprovechar». «Deberíamos tener más equipos, jugadores, mejores estructuras, entrenadores... las cosas no se hicieron bien y lo demuestra que a La Salle no les quedó ni un pabellón para jugar, el del colegio lo han tenido que adecuar casi pidiendo limosna. Eso costaba lo que un desplazamiento en ACB y les habría quedado un magnífico pabellón para entrenar, por ejemplo», enumera Anglada, para el que «la ACB tuvo cosas buenas, pero si ponemos en una balanza pros y contras... Sí, es cierto que iban 5 mil al Pavelló y toda la Isla apoyó. Una cosa así no la veremos nunca más, no creo que Menorca sea capaz de generar eso con otra actividad, pero insisto en que no se aprovechó, se debió promocionar más el basket, exprimir más el producto, como el tema de los entrenamientos por ahí... venían como obligados a Ciutadella. Debieron regalarse balones en los colegios, poner aros, potenciar realmente el basket, pues en realidad no se que ocurrirá cuando nos retiremos los entrenadores veteranos, no sé quién guiará a los jóvenes».

8PERCEPCIÓN IRREAL. «Llull, Sans o Suárez no son la realidad del basket menorquín o un reflejo de lo que hagamos aquí», subraya Anglada, para el que esa equivocada óptica anidó a su modo para una influencia clave en la desaparición del Menorca Bàsquet también. «El Menorca era un equipo de LEB que circunstancialmente subió a ACB. Su error fue querer mantener la plaza por muchos años a cualquier precio, no se supo ver que no pasaba nada por un descenso. Y si te salvas, haces un presupuesto mínimo y a luchar otra vez... no supieron digerir su realidad ni ver cual era su lugar; Menorca era un buen equipo de LEB, no más. Y ni quiero hablar del dinero que se llegó a gastar», profundiza el técnico menorquín.

9FEDERACIÓ BALEAR. Anglada reitera en la necesidad de recuperar una competición fuerte en la Isla. «La gente de Menorca volverá a la realidad, a 'nuestra' realidad. En mi opinión fue un error salirnos del grupo catalán de EBA, y no es cierto que los catalanes no nos quieran, pero venir aquí y encontrarse según que arbitrajes... Necesitamos que la Primera Balear o la Copa tengan atractivo y un cierto mando en la Federació Balear y con ello me refiero a Estarellas y sus secuaces, que no saben lo que quieren. Por ejemplo, lo del Pla y Andratx, dejarles fuera de la EBA, ha sido un desastre. Y no han caído cabezas, lo que aún entiendo menos», vierte el técnico en un discurso tan crítico como fundamentado para virar hacia el «CTEIB, ¿qué pasa, dónde están los frutos? Kike Llopis no juega, Marc Fortuny tampoco... jugadores con talento que se fueron para progresar. Es obvio que falta algo que enganche a los jugadores para que quieran llegar hasta senior».

10 VOLEIBOL. La progresión del CV Ciutadella en la última década, convertido en uno de los mejores y grandes equipos de España de volei femenino, puede haber 'robado' protagonismo y margen de acción al baloncesto en Ciutadella. En ese sentido, Anglada no contempla un impacto gravoso. «Habrá perjudicado más al baloncesto femenino, pero son deportes distintos», inicia el técnico al respecto. «Daño no creo que haya hecho, más allá de las envidias que había en el CB Ciutadella hacia el volei, un club que ha hecho las cosas bien. Además, se trata de un deporte minoritario, todo cuesta menos... y la verdad es que criticando no arreglas nada. No creo que el problema del basket en Ciutadella haya sido el voleibol», sentencia el prestigioso técnico.